La presencia de la Unidad Militar de Emergencias (UME) es la principal novedad del dispositivo especial de lucha contra el coronavirus en La Rioja. A lo largo de este lunes, la presencia de vehículos militares no ha pasado desapercibida en la región, que vive su segunda jornada consecutiva de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma en la medianoche del sábado.
La UME, creada específicamente para reforzar a los habituales servicios de emergencias, ha tomado posiciones en La Rioja con unos setenta agentes para realizar las primeras comprobaciones sobre el terreno de cara a habilitar posibles hospitales de campaña y localizar los recursos más básicos para garantizar el suministro a los ciudadanos. En localidades como Haro o Navarrete, las patrullas han sido constantes a lo largo de toda la jornada y el Ayuntamiento de Calahorra ha indicado que su localidad también pertenece a las rutas donde la Unidad Militar de Emergencias desarrolla su despliegue. Entre otras actuaciones en la ciudad, los militares han desinfectado la estación de ferrocarril.
Paralelamente a eso, sus agentes -equipados con trajes de protección bioquímica- han desinfectado dependencias como el albergue de peregrinos de Logroño (donde ofrecerá labores de apoyo a las personas sin hogar) y el Ayuntamiento de Alfaro, así como la estación de tren, el ambulatorio y el centro de salud de esta última localidad.
