La Rioja

La sentencia del 14-N en Logroño: casi seis años de cárcel

El conocido como ‘No Caso del 14-N’, derivado de los incidentes de la huelga general del 2012 en Logroño, ya tiene sentencia. Pablo Alberdi ha sido condenado a cuatro años y nueve meses de prisión por desórdenes públicos (un año) y atentado contra la autoridad (tres años y nueve meses), mientras que Jorge Merino ha recibido una pena de un año de cárcel por desórdenes públicos.

El Juzgado ha absuelto al primero de ellos del cargo de lesiones a un policía por una presunta pedrada en la rodilla, aunque deberá abonar al agente, en concepto de responsabilidad civil, un total de 120 euros por las lesiones sufridas.

El tercer encausado, Iñaki Iribarren, quien se ha mantenido lejos del foco mediático y ha librado la batalla judicial por su cuenta, ha sido condenado a seis meses de prisión por un delito de desórdenes públicos, ya que aceptó los cargos que se le imputaban a cambio de no entrar en la cárcel.

La abogada Henar Moreno ha agradecido el apoyo recibido por ambos durante estos años de calvario judicial, señalando que “esto no acaba hoy”. “A la vista del juicio celebrado hace cinco meses, yo creo que se vio claro que éramos optimistas y que no sólo no habían podido probar la culpabilidad de Jorge, Pablo e Iñaki sino que nosotros habíamos conseguido probar su inocencia”, ha añadido.

“Como veníamos denunciando desde hace tiempo, comprobar la inocencia no basta y hay que acreditar que esto es un montaje porque si no, siempre queda la estrategia de copiar y pegar el propio escrito de acusación”, ha explicado Moreno, quien ha detallado que todavía les queda por estudiar la sentencia (123 páginas) más a fondo para ver posibles recursos que finalicen con la absolución de los encausados.

“Con esta sentencia se lanza un mensaje a los ciudadanos: siempre conviene pactar. Da igual que tú consideres que eres inocente, yo te ofrezco algo para que no haya ingreso en prisión y si tú quieres demostrar tu inocencia te juegas cinco años de prisión, como los que se le han condenado a Pablo”, ha indicado la letrada: “Esto no preocupa porque ya no atenta contra la libertad de expresión, manifestarse, movilizarse y luchar por nuestros derechos sino que atenta contra el derecho a un juicio justo”.

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