Ángel María Villar, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ya ‘descansa’ en su casa de Santo Domingo de la Calzada tras salir de la prisión madrileña de Soto del Real, junto a su hijo Gorka, después de pagar el pasado martes las fianzas de 300.000 y 150.000 euros, respectivamente, que les impuso el juez del caso Soule, Santiago Pedraz.
Padre e hijo abandonaron la prisión madrileña sobre las 19 horas ante las decenas de periodistas que les esperaban a las puertas de la cárcel, donde ingresaron el pasado 20 de julio. Tres días más tarde, los reporteros del programa ‘Las Mañanas de Cuatro’ han localizado a Villar en La Rioja.
“Se trata de una urbanización de lujo que se ha convertido en su particular refugio. Villar pasa unos días en Santo Domingo de la Calzada en un lugar con muchas zonas comunes y con pocas posibilidades de ser visto. Además, algunos vecinos se han molestado con la presencia de las cámaras de ‘Las Mañanas de Cuatro’ y aseguran que ponen las manos en el fuego por él”, han señalado desde el programa.
Santo Domingo de la Calzada se ha presentado siempre como el santuario del que fuera presidente de la RFEF durante 29 años, en el que reunía más propiedades y en donde se aislaba cuando sus obligaciones profesionales se lo permitían. En esta localidad riojana acumula, además del piso con el que ya llegó a la federación, dos dúplex, sus respectivos garajes y trasteros y dos fincas a nombre de su esposa.
Operación Soule
El auto del juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, en el que levantaba el secreto de sumario de las actuaciones de la operación ‘Soule’ y decreta la libertad provisional bajo fianza del expresidente de la RFEF Ángel María Villar, su hijo Gorka y Juan Padrón, también confirmó que el presidente de la Federación Riojana de Fútbol (FRF), Jacinto Alonso, figura como investigado en este caso y que ya ha prestado declaración junto a otras 11 de las otras 23 personas investigadas.
