La Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja tiene a su favor cuatro claves diferenciales para mirar el futuro con optimismo y apuesta por mantener el acento en su diversidad y riqueza, ha afirmado su presidente, Fernando Ezquerro.
Esta denominación, que comparten las comunidades riojana, vasca y navarra, es, ha añadido, «un motor socioeconómico del territorio en el que se encuentra que trabaja con empeño, constancia y responsabilidad, anteponiendo, como siempre, los intereses comunes de Rioja».
Ezquerro presenta este viernes en Logroño la memoria de 2023 del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, año en el que ha batido su récord de visitantes en enoturismo, con unas 880.000 visitas a bodegas; y en el que ha mantenido su posición como líder en los mercados del vino.
Así lo defiende en ‘Una denominación con presente y futuro’, que es el título del mensaje de bienvenida que firma Ezquerro en la memoria del año pasado, un 2023 que define como «retador» por el contexto de ralentización económica de los mercados y la caída del consumo mundial de vino.
También resalta la fuerza de la DOCa Rioja, que puede mirar al futuro con optimismo gracias a cuatro claves diferenciales, como la experiencia que le otorga el casi siglo de su historia; la diversidad y singularidad de esta región vitivinícola; y el apoyo de los consumidores, que la sitúan como su denominación de preferencia. A ello ha unido el hecho de ocupar la cúspide del enoturismo nacional, lo que constituye un gran modelo con proyección internacional.
Madurez y solvencia
«Todo ello nos ha traído hasta la posición de referencia que hoy en día ocupamos», según Ezquerro, quien destaca que la DOCa continúa con su apuesta por la innovación, la digitalización aplicada y la sostenibilidad, entendida como un vector transversal, con «el objetivo de seguir generando valor en nuestro entorno».
En su escrito, asegura que en 2023 quedó patente que Rioja es «una denominación con una gran capacidad de adaptación, que ha de enfrentar las situaciones complejas desde la madurez y la solvencia».
«Estamos comprometidos con nuestra historia, con su historia y con sus valores» y «queremos continuar aportando valor a las personas, estando cerca de ellas en su día a día y en los momentos de celebración», indica el presidente del Consejo Regulador.
«Permanecer a su lado y que nos elijan como su vino y destino de referencia es el verdadero secreto de nuestro éxito», según Ezquerro, quien considera que la DOCa Rioja es «una denominación resiliente, que sabe trabajar por el bien común y con el compromiso inquebrantable que este escenario de gran inquietud requiere».
Un ADN de pioneros
La fuerza de esta denominación reside en su historia, en la tierra que comparte y en «un ADN de auténticos pioneros», que le permite «superar los retos, que no han sido pocos en casi 100 años, con valentía, adaptación y profesionalidad», subraya en su mensaje.
Ezquerro señala que la DOCa ha logrado mantener su posición de liderazgo a lo largo de 2023, al conservar un 27,2 por ciento de cuota en el mercado doméstico y acaparar cerca del 40 por ciento de las exportaciones nacionales de vino con denominación de origen.
Estos datos, para él, son el reflejo de la confianza de los consumidores por los vinos de Rioja, cuya reconocida calidad y excelencia la han convertido en «una de las denominaciones más respetadas y de mayor prestigio mundial».
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