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La SD Logroñés no pasa del empate y podría bajar este domingo

La SD Logroñés ha empatado frente al Fuenlabrada (0-0) y podría descender dentro de horas. Con 29 puntos, los riojanos se quedan a nueve del Sestao River (38), cuando faltan los mismos por jugarse. Lo que les salva, al menos hasta el domingo, es que le tienen ganado el golaveraje a los vizcaínos, que han perdido ante el Deportivo (0-1). Eso sí, si el Sabadell vence al Nàstic, se acabó.

Con la Segunda Federación a punto de convertirse en realidad y el conocimiento de que Larrazabal no seguirá como técnico en la próxima campaña, los locales han saltado con Iru en portería; Cova, Murua, Aurtenetxe, Paredes en defensa; Dani Garrido y Curro como pivotes; con Óscar Fernández, Salado y Manny en la línea de tres y Jordi Escobar arriba. Un once que tenía la responsabilidad de, al menos, evitar el mal trago de descender como local. Con la derrota del Sestao, solo la derrota convertía en matemático ese escenario. Y eso es lo que han tratado de evitar los blanquirrojos durante el partido.

Quizá por no tener nada que perder, su primera parte ha resultado mejor que en jornadas pretéritas. Intercambio de golpes entre ambos conjuntos, con varios penaltis reclamados por los riojanos y un disparo de Dani Garrido que casi significa el primero. Los madrileños, exigidos tras no ganar desde el 10 de marzo, también han gozado de acercamientos, mediante dos testarazos de Álvaro y Raúl. Alternativas en un encuentro de drama absoluto. Tenso ambiente en las gradas, en torno a medio millar de espectadores y comentarios de desaprobación hacia la labor del técnico y de algunos futbolistas.

Aun con todo, un equipo que está hundido moralmente no puede ser del todo genuino en el campo. Es algo que ya ha admitido Larrazabal en numerosas ocasiones, no hace falta redundar más en ello. Con sus limitaciones, la Sociedad ha buscado una victoria que ya se le resiste durante diez jornadas. Escobar, en posición escorada, se ha plantado ante el guardameta y no ha sabido que hacer. Poco después, Manny ha estrellado su volea en un defensor. Tímidas oleadas sin continuidad.

A falta de un cuarto de hora han saltado Gexan, Damià y Jaráiz. A alguno del público no le ha gustado ese cambio y lo ha hecho saber, voz en grito: “¡Pero quita a Salado, inútil!”. Demasiados nervios, demasiadas dudas en defensa y ansiedad por conseguir un triunfo que no ha llegado. El Fuenlabrada, por su parte, ha dado el punto por bueno y se ha dedicado a perder tiempo de todas las formas posibles. Apenas se ha jugado nada durante los cuatro minutos de añadido. “A la olla, a la olla”. No quedaba otra en el 94′, pero ya no ha podido ser. Empate insuficiente que acelera el desenlace. “Mercenarios, sinvergüenzas”, así han despedido algunos hinchas a los suyos.

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