El Rioja

Llega la primavera y brota la vida en Viña Lanciano

Fotos: Bodegas LAN

Cuando llega el mes de abril los días se alargan y los suelos donde reposan las cepas empiezan a calentarse, marcando el comienzo de un nuevo ciclo. Vuelve la vida al viñedo y lo hace con una señal esclarecedora: las lágrimas. Llorar puede parecer una señal de debilidad, pero realmente es síntoma de que estamos vivos. Este pensamiento, que se atribuye, quién sabe si certeramente, a la escritora Charlotte Brontë, adquiere especial sentido hablando del viñedo de Viña Lanciano y su ciclo vital.

Cada año por estas fechas la savia de las plantas cobra vida y empieza a correr por la planta hasta llegar a los cortes que, semanas atrás, se hicieron durante la poda, provocando un llanto, un lloro, desde las ramas. Esto es síntoma inequívoco de un nuevo comienzo, algo que Victoria Vicente, enóloga del equipo técnico de Bodegas LAN, califica de “fenómeno de la naturaleza”. Esa savia en forma de lágrimas marca el comienzo del nuevo ciclo vegetativo y el despertar de las cepas en el campo.

Durante estos días se trabaja el suelo y se prepara para soportar los cambios en el clima que se esperan según avancen las estaciones. El equipo de campo de LAN ha triturado previamente los restos de madera sana que se han generado tras la poda, reutilizándolos y distribuyéndolos por el viñedo de Viña Lanciano en un proceso conocido como ‘mulching’. Este evita, a su vez, generar emisiones debido a la quema de residuos y que en LAN es solo una de las acciones de sostenibilidad que se llevan a cabo en la bodega y el viñedo. El ‘mulching’ permite regenerar el suelo con el propio material del viñedo, una acción circular en la que se aprovecha el residuo y se reducen emisiones de CO2.

El viñedo, ese paisaje de vida, se convierte en una estampa digna de ser retratada en un cuadro: “Ahora es el momento de quitar las hierbas, de dejarlo bonito y contemplar
la vida que se muestra en las flores que van apareciendo, lentamente, en las cubiertas vegetales que cubren el terreno entre las cepas de Viña Lanciano”, comenta Victoria. En esta viña no se utilizan herbicidas (está en proceso de certificación ecológica) y todo el trabajo es manual, salvo el uso del pequeño y útil intercepas.

Tiempo de trasiegas

Como explica Victoria, en la bodega tampoco se para. Es en esta época en la que empiezan a llegar “los juguetes”, como ella llama a las barricas nuevas, destinadas a llenarse de algunos de los vinos que compondrán el futuro Viña Lanciano 2023. Hasta entonces, cada uno de ellos permanecía en depósitos, donde se produce la transformación maloláctica que actúa suavizando su textura, al convertir el punzante ácido málico en el amable ácido láctico.

Hasta la bodega llega un mosaico de barricas de distintas procedencias (robles franceses, americanos, pirenaicos o húngaros) que aportarán matices diferentes a cada vino, proporcionando una variada paleta que permitirá escoger para lograr el equilibrio perfecto. Este balance se logra, además, combinando estos vinos con otros que ya están reposando en barricas usadas porque se busca un menor impacto de la madera en ellos. Así se suman elementos de complejidad al futuro ‘coupage’.

El movimiento de los vinos desde los depósitos, conocido como trasiega, se hace de la forma más respetuosa posible con ellos, preservando todas las cualidades que conservan desde la viña y que han ido adquiriendo durante la fermentación y la maloláctica. Es un momento delicado, en el que el líquido de color rojo vivo se va trasvasando hasta su destino.

De nuevo, la vida fluye, esta vez, camino de un merecido reposo que durará unos meses, dependiendo del tipo de vino: maderas más usadas para vinos más delicados y nuevas, de distintos robles, para los vinos más robustos y preparados para absorber toda esa potencia. Qué vino va a qué barrica se decide, claro, mediante análisis y una cata en la que se confirma el potencial de cada uno, además de compararlos con los vinos de años anteriores para hacerse una idea definida de su evolución. El ciclo continúa, sin descanso, en la búsqueda de ese nuevo vino que mostrará todo lo que ha ido ocurriendo con el transcurso del tiempo.

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