La UD Logroñés ha ganado al Valle de Egüés (3-2), en un partido donde ha llegado a desaprovechar dos goles de ventaja. Menos mal que ha podido subsanarlo para cosechar un nuevo triunfo ante su afición. Los futbolistas blanquirrojos han portado brazaletes verdes en homenaje al Día Mundial contra el Cáncer y han celebrado el cumpleaños de su entrenador Diego Martínez con una victoria. Ni sólida, ni brillante, pero nadie se acordará de esta noche a final de temporada. Además, la jornada sí ha resultado positiva. El equipo se queda a solo dos puntos de la segunda plaza, después de que el Barakaldo empatara en Calahorra (1-1). No ha fallado, sin embargo, el líder Bilbao Athletic. Por lo tanto, el ascenso directo sigue a ocho de distancia.
Celebración del 2-0, marcado por Madrazo / Foto: UD Logroñés
Sin cumplirse el cuarto de hora, los blanquirrojos ya se han colocado 2-0. Sarriegi ha marcado en el minuto 9, después de rematar solo en el segundo palo. Muchas facilidades por parte de los visitantes, que han concedido el segundo tanto casi inmediatamente. Madrazo ha encontrado la red en el minuto 13. Llegado ese momento, parecía que la tarde ya estaba hecha y la victoria, asegurada. Aunque parezca increíble, el Valle de Egüés ha logrado empatar el partido muy momentáneamente. Un partido que Unai García ha jugado como titular, mientras que Enzo y Yasin se han caído de la convocatoria por lesión.
Ya con el 2-0 a favor, la UD Logroñés ha perdonado en alguna ocasión y ha sufrido la lesión de Jony. En el minuto 15, el ‘9’ se ha resentido y ha tenido que ser sustituido por Yurrebaso. No ha parecido que revistiera gravedad, pero las pruebas médicas siempre tienen la última palabra. Tras dicho percance, los riojanos han dominado el partido de forma casi señorial y han podido hacer el tercero, por ejemplo, con un chutazo de Beñat que Lekunberri ha despejado. Sin embargo, el encuentro ha tomado otros derroteros. Ya antes del descanso, Ibai ha asistido a Palacios para que hiciera el 2-1, casi debajo de la línea de gol. Primer aviso.
Jony se retira del campo con problemas físicos
Por increíble que parezca, el Valle de Egüés ha empatado en el minuto 56. Chutazo de Fermín García para poner el 2-2 y caras perplejas en los 2.963 aficionados que han acudido al campo. No era para menos, en un partido bastante peculiar, por decir algo. Bizarro es un adjetivo que puede encajar para ese minuto 56. Herida en su orgullo, la UD Logroñés ha buscado el gol desde el saque inicial y en su primera intentona, Urcelay ha batido a Lekunberri con un disparo en parábola desde la frontal. Ni un minuto han tardado los locales en deshacer esas tablas. Teniendo en cuenta la diferencia futbolística y presupuestaria entre ambos equipos, no cabía otro desenlace que otro +3.
Aun así, el 3-2 era un resultado corto y muy peligroso. Los navarros han pasado la práctica totalidad del partido en defensa, muy atrás y con muchos problemas. Diego Martínez no ha querido sobresaltos: primero ha hecho debutar a Marchena y después, ha agotado los cambios con Goti, Seguín y Carlos Bravo, Una clara declaración de intenciones para que su equipo marcara el cuarto y evitara que una tarde rara acabara en pequeño desastre. Beñat se la ha dejado a Carlos Bravo y el delantero ha querido marcar de tacón, en una ‘delicatessen’ que el defensor ha sacado bajo la línea.
A pesar de no conseguir el cuarto, la UD Logroñés no ha sufrido. Ha defendido como mejor se hace, en campo contrario y sin que un equipo de zona baja pudiera crear peligro. Está claro que esos dos goles han sido un accidente. Una circunstancia que no ha reflejado la evolución de un encuentro donde los locales han podido marcharse con cinco o seis goles a favor. Al fin y al cabo, no todos los días se puede golear. Concluido el encuentro, el Fondo Sur de Las Gaunas ha despedido a Diego Martínez con “¡Cumpleaños feliz” y también con otro mensaje: “¡Que sí, joder, que vamos a ascender! Ojalá se cumplan sus deseos.
