Toros

Nek Romero, una puerta grande sin historia

Foto: Miguel Pérez-Aradros

Llegó a la quinta la vencida y no fue hasta este último capítulo de la feria del ‘Zapato de Oro’ de 2023 cuando se abrió la puerta grande del Arnedo Arena. Por ella se fue a hombros Nek Romero, que a fuerza de ser generosos, el recuerdo que deja su toreo es un tanto vago. Resultó plomiza y, en ocasiones, tediosa una tarde en la que los novillos de Fuente Ymbro resultaron colaboradores y, en conjunto, ofrecieron el triunfo a una terna que no supo aprovechar aquellas condiciones ni tampoco hacerlas romper hacia adelante.

Se aplaudió de salida al novillo encargado de abrir plaza, de lejos, el más cuajado y rematado de un encierro correcto de presentación, sin exageraciones y con las hechuras apropiadas para embestir. Decía que el lidiado en primer lugar fue mal picado y perdió varias veces las manos durante la lidia, llegando muy parado al último tercio. Fue a parar a manos de Sergio Rodríguez, que sustituía hoy al lesionado Ismael Martín, y que, si nadie lo remedia, en junio cumplirá tres años en el escalafón de novilleros con picadores. Vino a no decir nada Rodríguez con él y hasta llegó a ponerse un tanto pesado. Se partió el pitón de salida el corrido en cuarto lugar y, cuando empezaba a gustarse en su recibo a la verónica, Rodríguez cambió de palo y terminó su recibo por chicuelinas. Humilló y empujó en el caballo el novillo de Fuente Ymbro, que sacó pies también en banderillas. Inició el novillero abulense su faena de rodillas y pronto se vio desbordado por aquellas embestidas tan explosivas en sus inicios. Fue este otro trasteo demasiado prolongado en el tiempo y mal rematado con la espada.

Foto: Miguel Pérez-Aradros

El novillo lidiado en tercer lugar evidenció su falta de recorrido al poco de saltar al ruedo. Un quite por chicuelinas y los primeros cambiados por la espalda de Sergio Sánchez no parecieron ser el mejor antídoto para aquellas carencias del de Fuente Ymbro. Y hete ahí que el novillo se puso a repartir cabezazos y tornillazos al final de cada muletazo. Aquella fatídica misión fue rematada de estocada habilidosa y caída.

De rodillas frente a chiqueros tuvo que esperar paciente Sergio Sánchez hasta que los de la ‘Strapalucio’ terminaron el ‘Soldadito marinero’. Echó cuerpo a tierra y aún pudo ser cogido de muy feas maneras contra las tablas. Inició también de rodillas su trasteo con cambiados por la espalda y un manojo de naturales. Fue generoso en las distancias Sánchez, pensando, tal vez, que ‘Mimoso’ era una máquina de embestir. Y que quizás lo era, pero Sánchez nunca le enseñó a embestir. Ni con aquel saludo a pies juntos ni con aquel quite por gaoneras le indicó los caminos a seguir a su enemigo, que fue pronto y hasta tuvo galope. Muchos pasos perdió Sánchez y los tropezones fueron diluyendo un trasteo sin gran historia.

Foto: Miguel Pérez-Aradros

Decía que se erigió como triunfador de la tarde el valenciano Nek Romero. Su primer trasteo resultó tan pulcro como carente de hondura y profundidad; de más acompañamiento que sometimiento. Dibujando siempre líneas rectas, como si a su toreo le faltara una dimensión a partir del embroque. Cierto que hubo temple, pero no es menos verdad que faltó reunión. Fue a menos el novillo de Fuente Ymbro, sin perder nunca ni fijeza ni prontitud. Tuvo 20 y Romero no se los supo dar de verdad. La estocada, de la que salió prendido, cayó arriba y fue fulminante.

Foto: Miguel Pérez-Aradros

Hizo quinto una auténtica pintura. Tan bajo de manos y recogido de pitones. Lo recibió Romero a pies juntos, saliéndose suelto de los lances por el izquierdo. Tuvo también sus 20 muletazos y Romero sólo aprovechó unos pocos al principio, cuando supo entender las inercias de aquellos buenos viajes. Se rebrincó la embestida por el pitón izquierdo al mismo ritmo que el trasteo fue perdiendo intensidad y calidad. Unos circulares y unas luquecinas, asida la muleta por la alcayata, casi que ya ni se recuerdan. Dejó una estocada trasera y tendida, que necesitó de un certero golpe de descabello.

Arnedo Arena. 5ª y última del ‘Zapato de Oro’. Un tercio de plaza. Novillos de Fuente Ymbro, correctos de presentación y de buen juego y con posibilidades en conjunto. Deslucido fue el primero y complicado el cuarto.

– Sergio Rodríguez: silencio y silencio tras aviso.

– Nek Romero: oreja con petición de la segunda y oreja tras aviso.

– Sergio Sánchez: silencio y palmas tras aviso.

Saludaron Rubén Sánchez y J.A. Ventana tras banderillear al primero y Vicente del Pozo tras hacer lo propio en el segundo.

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