El hogar de mayores Camino de Olivos, asentado en el barrio logroñés de La Cava, es la primera residencia de La Rioja especializada en daño cerebral adquirido. Desde al año pasado, cuando se inauguraron sus instalaciones de la mano del Grupo Gerontorioja, el centro trabaja en cubrir una necesidad percibida en la gestión del resto de residencias que gestiona el grupo porque hasta ellos llegaban personas que habían sufrido un daño cerebral, mayormente ictus, y cuyas familias no contaban con ningún centro como recurso.
Este servicio, ubicado en un ala del hogar, se enfoca en la atención de personas mayores de 60 años y lo hace a través de terapias, profesionales e instalaciones específicas.Un recorrido por dichos espacios permite conocer a fondo cómo funciona este módulo exclusivo en la comunidad autónoma que sitúa a Camino de Olivos a la vanguardia.
“Por suerte, en esta comunidad autónoma contamos con una unidad de Ictus en el Hospital Provincial que funciona muy bien donde se realizan estancias de rehabilitación temporales pero son estancias muy limitadas en numero y duración, en nuestro caso, la gente reside en el propio centro durante el tiempo que necesite recibiendo una terapia intensiva, diaria e integral en la que se implica a todos los técnicos especialistas en neuropsicología, logopedia, fisioterapeuta y terapia ocupacional del centro”, destaca la gerente de Gerontorioja, Inés Aguado, mientras visita las salas donde se imparten los diferentes cuidados en daño cerebral.
Exteriores del hogar Camino de Olivos
Con capacidad para 20 personas, Camino de Olivos tiene cubiertas actualmente el 60 por ciento de las plazas que ofrece y que son atendidas por un personal especializado en tratamiento de daño cerebral adquirido. Técnicos todos ellos que valoran el perfil del usuario y desarrollan de manera conjunta y coordinada un programa personalizado, que facilita mucho el trabajo con los pacientes y que es valorado muy bien por las familias dado el grado de acompañamiento que implica.
Un programa personalizado para cada persona
“Puede haber casos en los que actúe primero la fisioterapeuta porque cree que primero deben recuperar funcionalmente una extremidad paralizada y que luego empiece a trabajar la terapeuta ocupacional, o bien casos de disfagias o afasias y que son tratados por la logopeda o la neuropsicóloga, todos se van coordinando en función de las necesidades del usuario y su evolución”, destaca Aguado.
Una de las ventajas que ofrece el módulo de Daño Cerebral Adquirido de Camino de Olivos es que los usuarios disfrutan de un total acceso a los espacios del Hogar, aunque cuenten con su propio salón y comedor. Unos espacios que incluyen unos 7.500 metros cuadrados de exteriores que a diario pueden aprovechar.
Estas personas, además, tienen la oportunidad de participar en diversas actividades grupales organizadas por el centro, así como sesiones individuales que se imparten a lo largo de toda la semana enfocadas a cada uno de los perfiles y necesidades que existen. Entre los servicios que brinda esta atención única en La Rioja se incluye también el módulo de vivienda de entrenamiento en actividades básicas e instrumentales de la vida diaria que se ofrece para facilitar a los usuarios el tránsito hacia su modo de vida anterior a las lesiones. Todo una gama de oportunidades para favorecer la recuperación de los pacientes desde la cercanía y la profesionalidad
