Natxo González, técnico de la UD Logroñés, ha comparecido en rueda de prensa tras la derrota frente al Real Murcia (0-1). El vasco ha asumido la situación del club: “Quince jornadas sin ganar, es la realidad, seguimos intentándolo, tratando de cambiar la dinámica y no lo hemos conseguido una vez más. Hacemos muchas cosas bien, llegamos mucho al área contraria y nos cuesta mucho finalizar en gol y es el debe que tenemos. Hemos empezado muy bien, con ese pase atrás de Jaime, que justo le ha pegado la pierna mala. Independientemente del resultado, hemos tenido buenas fases y su portero ha intervenido en tres o cuatro con acierto”.
La dinámica es nefasta y la afición ha pedido la cabeza del técnico. ¿Sigue contando con la confianza de la directiva?. Respuesta clara: “Los resultados son los que son, no los puedo defender, pero quizá sí se valora el trabajo del día a día. Eso hay que transformarlo en resultados y el crédito de un entrenador siempre está ahí. Se puede confiar mucho, hasta que se deja de confiar. Todos vemos, aunque sea difícil de asumir, que se está trabajando bien y aunque no da, todos estamos poniendo lo nuestro”. También apela a la piña: “Tengo la sensación de que estamos unidos y para mí eso es lo más importante”.
Aún así, ha recalcado la realidad de un equipo hundido e incapaz de reponerse: “No suelo hablar con Juanjo después de los partidos, consideramos que no es el momento. Para mí, cada semana es importante y el entrenador es el responsable de todos los males. Soy el máximo responsable, el líder de este grupo y soy el que más expuesto está”.
En el aspecto deportivo, ¿qué le falta a este equipo?: “Yo creo que es más problema ofensivo que defensivo, pero tampoco hemos estado bien ajustando entre los centrales. Hay fases del partido donde tienes tú el dominio, luego el rival, cuando tú tienes la fase de dominio tienes que transformar las ocasiones y aprovechar las ocasiones. Hemos sacado mucho centro, pero no encontramos el rematador; porque no está, no ocupamos bien las zonas”. Casi 600 minutos sin marcar explican mucho esta situación del equipo.
¿Cómo puede solucionar esta situación? No hay recetas nuevas. “Trabajar al máximo como lo estoy haciendo. Cuando hablo de dejarme la vida es dar lo máximo, es lo que me corresponde y por eso estoy aquí. Dar todo lo que tengo, transmitir lo que siento, lo que pienso, buscar soluciones y meter todas las horas que metemos. Dedicación cien por cien al trabajo”. Pese a la derrota, sí ha visto algún rayito de esperanza. “Ofensivamente creo que hemos estado mejor que los últimos partidos, pero no podemos andarnos con especulaciones. Tenemos que ir a área contraria y tratar de hacer goles. Todo lo que hemos hecho muy bien hoy, tratar de seguir haciéndolo y con mejor organización en la zona de remate”.
Además, Natxo ha defendido su trayectoria: “También tengo muchos ascensos y buenas temporadas en el pasado, aunque interesa más fijarse en lo más próximo. Es verdad que mis experiencias en Deportivo y Málaga sí fueron malas, pero mirad dónde están ahora esos equipos, con seis o siete entrenadores en la temporada donde estuve. Luego estuve en el Tondela, que fue un exitazo y les mantuve en Primera División. La vida son altibajos y todo vuelve”.
¿Llegó en un mal momento a la UD Logroñés? Natxo lo ha negado rotundamente: “Para mí es un privilegio entrenar a este club, he llegado en el momento que me ha correspondido, porque entendíamos que era mi sitio y lo sigo pensando, a pesar del momento que pasamos, a seguir trabajando, a quedarse en casita y mañana que vuelva a amanecer”.
