El Logroño visita este domingo al Guadalajara, colista de la Liga Asobal, con el objetivo de afianzar su juego, después de su peor racha de la temporada, en la que solo ha sumado un punto en los últimos tres partidos.
El equipo riojano tratará de apoyarse en la buena imagen dada ante el Barcelona -aunque se cumplió la lógica y perdió- para tratar de dejar atrás unas semanas difíciles, por la derrota ante el Torrelavega y el empate en Valladolid, que le han llevado al octavo puesto de la tabla.
Los logroñeses avanzan poco a poco en la “integración” de Rivero y Dutra, tras sus graves lesiones, y probablemente mañana tendrán más minutos que en los partidos anteriores.
Pero por encima de sus aportaciones individuales, el Logroño necesita mejorar en su defensa, que presenta muchas dudas en el último mes, lo mismo que su portería, en la que Jorge Pérez y Markelau no alcanzan el nivel que se espera de ellos.
Es decir, el Logroño viaja a Guadalajara con muchas cosas que resolver y la presión de estar obligado a derrotar a un rival que solo ha ganado dos encuentros en lo que va de temporada.
