Sheyla Gutiérrez vuelve a sonreír once meses después de la terrible caída que sufrió en la Classique Morbihan de la Bretaña francesa, que le obligó a pasar por quirófano y de la que aseguró que “no sé lo que pasó, no recuerdo nada”.
La ciclista riojana se ha impuesto al sprint este martes en la primera etapa del Tour internacional de Ardèche y la emoción ha embargado a la varean, que confirma las buenas sensaciones que ya mostró en el Tour de Francia, donde fue una de las grandes agitadoras de la prueba con varias escapadas.
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“Solo las personas que te siguen, te quieren y te aprecian saben de verdad lo mucho que significa para ti todo esto. Haberte recuperado para el ciclismo, haber vivido el triunfo en un Tour. Y alzar, por fin, de nuevo los brazos; disfrútalo, Leona”, le ha felicitado su equipo.
Primer triunfo desde agosto de 2020
La riojana ha puesto así fin a un periodo de más de dos años sin ganar, después de imponerse en otra prueba en Francia en agosto de 2020.
Gutiérrez ya logró este año la medalla de plata en el Campeonato de España contrarreloj y también tuvo un papel destacado en el Campeonato de Europa, aunque no pudo llegar destacada a la meta.
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Tras sus buenas actuaciones, a la riojana le quedaba todavía el volver a disputar un esprint y este martes lo ha logrado con tan buen resultado que se ha impuesto a la canadiense Simone Boilard (ST. Michel), que han entrado con un tiempo de 3.03:23 para completar los 109 kilómetros de recorrido.
La italiana Silvia Zanardi (Bepink) ha sido tercera dos segundos después, con el mismo tiempo que la neerlandesa Loes Adegeest (IBCT), mientras que el pelotón ha entrado en 3.03:28 liderado por Typhaine Laurence (Arkea).
El Movistar, que este miércoles defenderá el liderato de la riojana, es el equipo español que participa en esta prueba de siete etapas en Francia, que se celebra de forma simultánea a la Vuelta a España femenina.
Este miércoles, la segunda etapa de la carrera tendrá una longitud similar, de 109 kilómetros, entre Lac de Champos y Montelimar.
