De paseos diarios, el Sereno de NueveCuatroUno recorre Logroño de punta a punta cada día y no hay cosa que más le guste que encontrarse con los vecinos y charlar. Compartir opiniones como esta que le explicó una vecina de la zona de la nueva estación de autobús y tren.
Una zona, a su juicio, donde se están construyendo ahora las calles. “Calles nuevas que podrían ser Calles Abiertas desde su nacimiento porque todavía están sin hacer. Calles que podrían tener carriles bicis en vez de aparcamientos para unos pocos vehículos; árboles grandes que diesen sombra tanto en las orillas de las calzadas como en la mediana que separa los carriles; alguna curva para que los coches no cojan velocidad; césped o jardines junto a la calzada (está demostrado que el verde ayuda a ir más despacio); y aceras con pavimento silencioso puesto que en ellas se van a concentrar todas las maletas que se dirijan a ambas estaciones…”.
Sin embargo, esta vecina de Logroño cree que se están construyendo calles como las que se destruyen en otros sitios de Logroño para hacerlas Abiertas: “Calles de cuatro carriles para que quepan muchos coches; calles rectas para que los coches corran; sin árboles ni vegetación en las medianas para que dé la impresión de que se trata de una vía rápida de circulación; calles con aparcamientos pero sin carriles bici y con pavimento ruidoso en las aceras”.
Son nuevas, señala, “pero nacen como Calles Cerradas, inhumanas, ruidosa… que por lo visto tendrán que venir otros a deshacer, gastando el doble, para convertirlas en Calles Abiertas. Todavía se está a tiempo de evitar. No pierdan la oportunidad de construir lo nuevo con el concepto de ciudad que dicen defender y que yo aplaudo”.
