El tráfico de drogas se ha convertido en los últimos años en el principal foco de crimen organizado en España, por encima del trafico de personas y otros delitos, ha afirmado el coronel de la Guardia Civil José Miguel Gordillo.
Gordillo participa este jueves en el curso de verano ‘Inteligencia y Seguridad’, que organizan la Guardia Civil y la Universidad de La Rioja y que en esta jornada se ha centrado en los retos que suponen el terrorismo global y el crimen organizado.
En un encuentro informativo, Gordillo ha recalcado que el tráfico de drogas es, con diferencia, el principal desafío del crimen organizado en España, ya que de las 503 organizaciones criminales que hay asentadas en este país, según fuentes policiales, la mayoría se dedican al tráfico de cannabis, cocaína y marihuana.
En España confluyen, ha explicado, un factor geográfico, que hace que sea la puerta de entrada a Europa del cannabis desde Marruecos; a la vez, se da la circunstancia de que “hay muchos ciudadanos de origen colombiano que se han especializado en el tráfico de cocaína” y “también es una plataforma del tráfico internacional de hachís”.
El tráfico de personas “también es creciente”, en especial el vinculado a la explotación sexual y, en menor medida, a la laboral, ha relatado Gordillo. “Las actividades criminales se concentran en las grandes capitales, en el áreas de costa y también en Galicia y País Vasco”, ha subrayado este coronel de la Guardia Civil, quien ha puntualizado que en el Campo de Gibraltar “ha bajado la delincuencia gracias a la implantación de un plan especial” para ello.
Para trabajar contra el crimen organizado, ha concluido, son vitales “la cooperación internacional, la coordinación interna y más recursos”; además de “poner el foco en las amenazas delictivas que puedan despertar más alarma en estos momentos”.
En el curso de verano también ha intervenido este jueves el coronel del Servicio de Información de la Guardia Civil José María Vázquez, quien ha incidido en que la lucha contra el terrorismo es “un proyecto compartido, en el que somos más fuertes si todos nos vemos comprometidos con lo mismo”.
Ha afirmado que, en la lucha contra el terrorismo global, es importante la colaboración ciudadana “cuando se identifican conductas que luego pueden ser investigadas”. “El terrorismo hecho por actores solitarios muchas veces no se ha expresado antes de querer atentar o por personas que no pertenecen a una organización o no han visitado zonas de conflicto”, ha explicado.
Por ello, las fuerzas de seguridad piden que, desde entornos cercanos, familiares o escolares, se comunique a las fuerzas de seguridad si han visto una conducta extraña en algún conocido. España, ha explicado, “por su posición, es un punto de paso muy demandado por flujos migratorios y por las organizaciones criminales que los favorecen”. Por eso, “la colaboración internacional es clave”, lo mismo que “trabajar en origen y favorecer las condiciones oportunas para que la gente no tenga que abandonar su país”, ha concluido.
