Especial Enoturismo

JIG, el aliado digital del enoturismo

El grupo empresarial JIG ofrece soluciones específicas para toda la cadena de valor de los servicios prestados por las bodegas: desde la gestión hasta la venta de entradas y la comercialización de productos. «El turismo es un acelerador tecnológico porque es uno de los sectores que antes y más rápido se ha digitalizado. Y esto es una gran oportunidad para las bodegas en el ámbito del enoturismo», asegura Javier Gurría, fundador de JIG, grupo empresarial especializado en la prestación de servicios avanzados en torno a las TIC. «El gran reto al que se enfrentan actualmente las bodegas es atraer visitantes y convertirlos en sus seguidores, consumidores y prescriptores de sus vinos».

Un desafío para el que JIG propone soluciones adaptadas a una nueva sociedad, más global, ágil e inmediata. Para ello disponen de una plantilla de más de 200 personas gestionadas por un equipo operativo de 30 personas. «Contamos con una gran variedad de perfiles técnicos en el área de la gestión, la administración, los recursos humanos, las humanidades, la informática, la programación, el diseño y el marketing. Esto nos habilita para conseguir los propósitos de nuestros clientes, que también son los nuestros».

Profesionales que ofrecen soluciones globales en internet relacionadas con el desarrollo de las aplicaciones móviles y las páginas webs, el comercio electrónico, la gestión comercial, el diseño digital centrado en la usabilidad y la experiencia del usuario, la integración de sistemas, la gestión de reservas y el software. «Creemos en un modelo de tecnología de conocimiento sectorizado y especializado», sostiene Gurría, quien explica que en JIG están focalizados en el desarrollo de tecnología para el sector del vino y las bebidas. Tanto es así que ofrecen una plataforma de gestión y venta de servicios enoturísticos.

«Es capaz de gestionar todo el negocio e integrarse con todas las soluciones existentes en la bodega», destaca. Esta herramienta permite crear experiencias, productos, proporcionar los precios, aforos, calendarios, horarios, promociones, descuentos y cupones de manera ágil, sencilla y autogestionable. De esta forma, «se habilita una solución de rápida implantación mediante una herramienta especializada que gestiona las particularidades del negocio enoturístico». Así mismo, desde JIG también pueden crear una plataforma de venta online para las bodegas y habilitarla en sus webs para la venta de servicios enoturísticos «de manera integrada e inmediata», destaca Gurría.

El director de proyectos de JIG explica que han creado recursos enfocados a los clientes de las bodegas durante sus visitas: la cata tecnológica y el winebar. «La cata permite al visitante jugar e interactuar a la vez que cata los vinos, lo que permite conocer sus gustos y recopilar datos al respecto».

Por su parte, el winebar posibilita a las bodegas que los visitantes realicen pedidos dentro de la propia instalación de la bodega de forma automática y que paguen al instante. «Es ideal para facilitar la venta de productos durante la celebración de diferentes tipos de eventos».

Otra de las herramientas específicas que ofrece JIG para el sector vitivinícola es Data Centric Platform. «Permite la integración de todas las fuentes de datos de la bodega en una sola herramienta para realizar acciones más eficaces, rentables y con mayor retorno», concreta Gurría, quien asegura que también es útil para forjar relaciones directas y personalizadas con los clientes sin depender de terceros.

«Todo nuestro trabajo se enfoca en crear soluciones para toda la cadena de valor del enoturismo, desde la gestión de los servicios hasta la venta online y offline, para cubrir una experiencia 360º», resume. Además, todas las herramientas están adaptadas a cualquier tamaño de bodegas. «Son escalables. Se puede ir añadiendo funcionalidades conforme a las necesidades de cada negocio enoturístico y al crecimiento y evolución del mismo».

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