La Rioja

La historia de Pradejón: del vino al champiñón a través de sus bodegas

Dentro de las actividades organizadas dentro de la Feria Fungitur 2022, el Ayuntamiento de Pradejón inauguró este sábado su bodega institucional. Acompañada por actos infantiles y degustaciones, la jornada sirvió para dar a conocer uno de los proyectos que se retrasaron por la pandemia y que atrajo la mirada de turistas y vecinos.

Alejado del entramado municipal, el barrio de bodegas de la localidad es un lugar singular, un fenómeno urbanístico y arquitectónico con profundas raíces en la historia de esta tierra. Sin ellos no se entendería La Rioja tal y como la conocemos. Pradejón, tampoco. Tras siglos siendo un lugar donde se elaboraba el vino, con la llegada de las primeros cooperativas esta zona del municipio vio nacer los primeros cultivos de champiñón, convirtiéndose en el origen de la agroindustria que tanto caracteriza hoy al municipio.

Este barrio de bodegas ya existía en 1753 y contaba con 37 bodegas, todas ellas situadas en el antaño denominado Barranco Pasillo. Durante más de dos siglos la morfología de las bodegas, la técnica para construirlas y el proceso de elaboración del vino que en ellas se producía permaneció prácticamente invariable.

Ya en el siglo XX llegaron algunas mejoras, como los depósitos de hormigón, pero a partir de los años 50 con el nacimiento de las cooperativas llegó el declive del barrio que a su vez permitió que algunas se reutilizasen para el cultivo del champiñón debido a las buenas condiciones que ofrecían los antiguos calados. Este sábado se dio a conocer a todos la historia de estas bodegas que aún persisten, ahora ya sin ningún tipo de cultivo en su interior.

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