Erik García es el vicepresidente de la DOP Aceite de La Rioja que este viernes ha inaugurado su VI Jornada del Aceite para homenajear este producto con sello riojano. Acto del que también se ha llevado su reconocimiento como tercer premio al mejor Aceite de La Rioja en la categoría Frutado Maduro.
Desde la Amazara Iregua que representa, destaca que el aceite de oliva virgen extra avanza con agilidad dejando huella en un mercado competitivo donde el consumidor cada vez valora más su calidad.
– La cosecha 2021 se caracterizó por ser larga en el tiempo y más mermada que la anterior. ¿Cómo valora los aceites que han resultado de ella?
– Pese a no ser 2021 el mejor año para el desarrollo del olivo, los aceites obtenidos han sido de una gran calidad. La sequía de la primavera y el mal cuajado del fruto incidieron en una cosecha más escasa en cuanto a cantidad, pero no afectaron a la calidad del fruto, que llegó al momento de la recolección en un estado sanitario excelente. En lo que se refiere al proceso de recogida, este se prolongó debido a las lluvias de finales de noviembre y diciembre, nada favorables para la calidad de la oliva. Por suerte, la mayor parte del fruto destinado a comercialización se recogió durante las tres primeras semanas de noviembre y dejó grandes aceites.
Erik García recibe el tercer premio a mejor Aceite de La Rioja en la categoría Frutado Maduro.
– Durante la Jornada del Aceite de La Rioja celebrada este viernes se han probado algunos de esos aceites. ¿Cuáles han sido las impresiones del público?
– Las personas que vienen a visitarnos siempre se sorprenden con la buena calidad del Aceite de La Rioja. Especial curiosidad producen los aceites elaborados con las variedades autóctonas de la región, como la redondilla, la royuela y la machona, por su singularidad y excelentes características. Con el paso de los años y con mucho esfuerzo dedicado a crear una cultura del Aceite de La Rioja, estamos consiguiendo que el producto sea más conocido y la fidelización de los que ya nos conocen. De hecho, el oro líquido riojano cada vez cuenta con más seguidores que no se pierden la cita con esta Jornada.
– ¿Qué supone volver a acoger este evento en las calles de la ciudad tras dos años de parón?
– Mucha satisfacción. Además de un día de celebración, para nosotros, la Jornada del Aceite de La Rioja es un punto de encuentro con los ciudadanos en el que podemos presentar con cercanía y transparencia nuestro oro líquido así como el esfuerzo que hace el sector por poner en valor un alimento bueno, sano y con una larga tradición en la zona.
– Un aceite con sello riojano se encuentra entre los tres mejores de España. ¿Cómo favorece este reconocimiento al impulso de la Denominación?
– Un premio a la calidad de cualquier aceite acogido a la DOP es también un reconocimiento a la propia Denominación de Origen. Los profesionales son los que impulsan y dan prestigio a la marca. Al final, la DOP Aceite de la Rioja es un reflejo del buen trabajo del sector y de la calidad del aceite producido. Y si de algo podemos presumir es de que nuestros productores ganan año tras año premios y reconocimientos en el ámbito nacional e internacional. La calidad del Aceite de La Rioja es incuestionable.
– ¿Cómo se está adaptando la DOP a las nuevas tendencias de consumo?
– La pandemia ha dejado un consumidor más sensible al cuidado de la salud y de su entorno, que valora las propiedades saludables de los alimentos y su autenticidad. No sólo busca la calidad sino el valor añadido de lo saludable. En esta demanda, el Aceite de La Rioja encaja a la perfección. Desde el Consejo Regulador, incluso antes de la pandemia, venimos impulsando campañas de comunicación dirigidas a fomentar el consumo de Aceite de La Rioja como alimento bueno, sano y de proximidad. Por otra parte, los trujales riojanos están adaptando sus instalaciones para el desarrollo del oleoturismo, cada vez más demandado por los ciudadanos, con el fin de potenciar la venta directa y de crear cultura del Aceite de La Rioja.
– ¿En qué horizontes trabaja ahora la Denominación?
– La Denominación sigue y seguirá trabajando por difundir el conocimiento de la marca de calidad dentro y fuera de La Rioja y también por garantizar el desarrollo sostenido del cultivo y de la producción. Para ello, desde el Consejo Regulador, llevamos a cabo planes de comunicación, de formación y de investigación con los que apoyar a los profesionales en la producción, elaboración y venta del Aceite de La Rioja.
