Paula Fernández (Braga).- Los jefes de Estado de España, Portugal e Italia defendieron este miércoles en la localidad lusa de Braga una apuesta por el potencial de la cultura para la innovación y el progreso económico, pero también como instrumento para la paz en una coyuntura marcada por la guerra en Ucrania.
El rey Felipe VI y los presidentes de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, e Italia, Sergio Mattarella, clausuraron el XV Encuentro Cotec Europa en el Teatro Circo de Braga (norte portugués), donde reflexionaron sobre las sinergias entre cultura e innovación, sin esquivar las alusiones a la crisis creada por la agresión de Rusia contra Ucrania.
“Las industrias culturales son relevantes para fomentar la innovación en el sector económico y contribuir a la competitividad”, defendió el jefe de Estado español, quien señaló que la cultura es un patrimonio intangible “clave para el progreso económico y el bienestar social”.
Y en materia de innovación, en el sur de Europa hay que seguir aprendiendo, pero también hay “algunas cosas que enseñar”, aseguró el rey, acompañado en Braga por la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital española, Nadia Calviño.
FOTO: © Casa de S.M. el Rey.
Entre los activos culturales que hay que aprovechar y potenciar destacó el español y puso como ejemplo el proyecto ‘Valle de la Lengua’, desarrollado por La Rioja, para impulsar el idioma como una “valiosa herramienta de desarrollo territorial, fomentando proyectos transformadores en torno a nuestra lengua”.
Ciencia en Español
El proyecto, explicó durante el foro la presidenta de La Rioja, Concha Andreu, busca que “las máquinas hablen nuestro idioma” porque “publicar la ciencia en español es también crear economía”.
“Necesitamos trasladar las palabras del lenguaje natural al de las máquinas (…) 600 millones de personas hablan en español, es importante indexar y crear un corpus de términos en español y que las máquinas nos hablen en español”, refirió.
Es una iniciativa de vocación nacional pero también internacional, que podría trasladarse a Portugal “con el valor y el peso que tiene la lengua portuguesa”, dijo Andreu.
También Rebelo de Sousa animó a “impulsar la industria de la cultura y la innovación”, para “ayudar a crear empleo y ayudar a la recuperación de la economía”.
FOTO: © Casa de S.M. el Rey.
Las crisis más recientes, como la pandemia de coronavirus, han sido un ejemplo de las sinergias entre cultura e innovación, recordó por su parte el italiano Mattarella, quien rescató “modelos innovadores”, como el hecho de que el 90% de los museos implementara procedimientos online para superar las restricciones.
Llamamientos a la paz
Con la pandemia ya en un segundo plano, la guerra en Ucrania marcó las conversaciones del foro, donde el rey de España apeló “a la paz, la cooperación, el respeto por los derechos humanos y el deseo del arreglo pacifico de las diferencias” ante la “terrible agresión” que vive el pueblo ucraniano.
Rebelo de Sousa apostó por la colaboración entre las distintas economías para superar el impacto de la guerra, a la que se refirió como “injusta, intolerable e ilegítima”, y subrayó que el encuentro de Braga es “una señal de la vida contra la muerte, de paz contra guerra y de esperanza contra desesperanza”.
La cita de Cotec es “señal del futuro” porque “aquí estamos construyendo paz y cultura”. “No nos frenó la pandemia y no nos frenará la guerra”, concluyó.
El presidente italiano instó a “imaginar cómo la cultura puede ser un vehículo de paz” y a dotar a la Unión Europea de “autonomía estratégica”.
“En este momento en el que la guerra ha vuelto al continente europeo, con millares de víctimas y destrucción devastadora, cultura e innovación tienen que ser instrumentos de paz, diálogo y futuro”, insistió.
Ambiente prepandemia
El foro concluyó con un almuerzo en la Universidad do Minho, hasta donde los tres jefes de Estado se trasladaron a pie por el centro histórico de Braga, donde se recuperaron costumbres prepandemia.
El rey y los presidentes de Portugal e Italia fueron arropados por vecinos y turistas que esperaban a las puertas del teatro, donde algunos consiguieron chocar el puño con los jefes de Estado e incluso hacerse algún “selfie”.
El proyecto Cotec surgió en 1990 y desde 2005 reúne a los jefes de Estado de España, Italia y Portugal en cumbres anuales rotativas para reflexionar sobre problemas y necesidades comunes a las empresas y economías en el contexto europeo.
