Un total de 15 personas voluntarias de Cruz Roja y de Rial Detergentes (que comercializa la marca Tejón) han limpiado en la mañana de este sábado 600 metros cuadrados de la ribera del Ebro en la desembocadura del Iregua.
En unos cien metros de orilla, seis metros de anchura y durante solo hora y media han recogido 2.300 residuos con un peso total de 125 kilos. Los residuos más habituales han sido toallitas (unas 750), trozos de plástico de menos de 50 centímetros (unos 700), trapos, latas… pero se han rescatado, por ejemplo, un extintor y un cochecito de bebé.
Esta actividad de ciencia ciudadana del Área de Medio Ambiente de Cruz Roja se realiza dentro del proyecto LIBERA de lucha contra la ‘basuraleza’, de SEO/BirdLife y Ecoembes, y sirve para disponer de un estudio y clasificación de los residuos encontrados en las riberas de los ríos españoles, así como un análisis de microplásticos en el agua de los ríos.
Se realiza en 157 arroyos y ríos de 15 comunidades autónomas, para generar la primera radiografía nacional de este problema. Para ello, se definió una metodología de toma de muestras, y en los últimos tres años se está llevando a cabo una acción nacional de muestreo, análisis e identificación de residuos y microplásticos.
Personas voluntarias de Cruz Roja aportan al estudio datos científicamente válidos. “Esta es una de las herramientas más potentes en lo que a conservación, investigación y sensibilización se refiere”, comenta Gabriel Alcañiz, responsable de Medio Ambiente de Cruz Roja en La Rioja. Previamente, se realizaron jornadas formativas de muestreo a los voluntarios y voluntarias de Cruz Roja.
El año pasado Cruz Roja La Rioja realizó dos campañas de muestreo de agua, una en primavera y otra en otoño. Las muestras confirmaron la presencia de microplásticos en todos los puntos analizados, algo que apoya la tesis de que los ríos se enfrentan a este problema invisible, de forma generalizada. De forma concreta, en la mayoría de los ríos y arroyos se detectaron fibras y fragmentos de pequeño tamaño. Es de destacar que estos resultados de presencia se repitieron en las dos épocas de muestreo, y de hecho aumentaron en la segunda, lo que confirma que su detección no se debe a la casualidad del momento del muestreo. De hecho, hubo mucha más densidad en las muestras de otoño respecto a las de primavera, al pasar de 7 a 55 microplásticos.
El proyecto Libera es un proyecto de metodología participativa a través del voluntariado, “en el cual se buscan soluciones basadas en la naturaleza para frenar las consecuencias del cambio climático y la degradación de la naturaleza. Cruz Roja, a través del voluntariado, tiene la capacidad de recoger esta información y aportar datos con los muestreos, que luego sirven para la toma de decisiones y la lucha contra la contaminación”, destaca el responsable del área de Medio Ambiente de Cruz Roja en La Rioja.
