Un total de 19 familias han sido realojadas este lunes a consecuencia de la explosión de gas natural que ha destrozado un bloque de viviendas de la calle Cristo de Lardero y ha afectado a un radio de 100 metros a consecuencia de la onda expansiva. En primera instancia, tal y como ha detallado el director general de Emergencias del Gobierno de La Rioja, los vecinos afectados han sido acogidos en el CRMF de la localidad, si bien el Ejecutivo gestiona el acceso a otras viviendas, ya que “es posible que en varios días no puedan regresar al inmueble”.
En cualquier caso, el Gobierno riojano ha asegurado que estos vecinos podrán recuperar sus enseres “imprescindibles” en cuanto los Bomberos consideren que el edificio es accesible.
Según ha explicado Héctor Ruiz, los Bomberos del Ayuntamiento de Logroño y la Guardia Civil investigan las causas concretas de la deflagración, si bien una explosión de gas natural registrada a las 7:33 horas de este lunes se perfila como la más probable.
FOTO: Raquel Manzanares (EFE).
“No corre peligro la vida de los heridos”
Como consecuencia de la misma, cinco personas han resultado heridas de diversa consideración, y aunque “todo apunta a que no corre peligro la vida de ninguna de ellas”, hay una que ha sufrido daños graves. Se trata de un varón que se encontraba en el interior del inmueble en el momento de la explosión, trasladado en UVI móvil hasta el Hospital San Pedro de Logroño, si bien el director general de Emergencias no ha podido detallar más datos sobre su estado de salud. Algunos de los otro cuatro heridos, de carácter leve, han recibido el alta hospitalaria mediada la mañana.
Nada más recibir el aviso de los vecinos, SOS Rioja ha movilizado hasta la calle Cristo a los Bomberos de Logroño y a dos ambulancias del Servicio Riojano de Salud, que se han visto complementadas por una UVI móvil y otra ambulancia de Cruz Roja.
Asimismo, hasta el lugar del suceso se han trasladado dos psicólogas del ERIE Psicosocial de SOS Rioja, que han prestado asistencia a los vecinos desalojados, con dos familias víctimas de un cuadro de ansiedad.
“La casa había volado”
La palabra “milagro” ha sido la más repetida en los testimonios recabados por NueveCuatroUno entre los vecinos del edificio, dada la magnitud de los destrozos ocasionados por la explosión. “Estaba en el baño y he oído una explosión; me he quedado encerrada y mi hija ha abierto la puerta a patadas”, explica Isabel, vecina del primer piso, quien explica que “he mirado por la ventana y he visto todo tirado en el suelo; alguna ventana todavía volaba”.
A Inma, residente en el ático siniestrado, la explosión le ha pillado fuera de casa, pero no así a su marido, una de las cinco personas heridas por el suceso. “Me ha llamado diciendo que la casa había volado; hemos pensado que era un atentado”. “Esto ha sido un milagro, no te quepa la menor duda; la suerte de la lotería la hemos gastado hoy. Toda”, afirma, aún conmocionada por lo sucedido.
“Un milagro”
En los mismos términos se expresa Manuel Vallejo, alcalde de Lardero, quien recalca que las consecuencias de la explosión “podían haber sido mucho peores”. “Ahora es solo un problema material y eso es lo más importante porque ha sido un milagro no tener que lamentar más daños personales”.
Los vecinos de la localidad cigüeña tardarán muchos años en olvidar las últimas fechas de 2021, un ejercicio en el que la conmoción se ha instalado en sus calles por el trágico ‘Caso Álex’ y el sobresalto de una explosión en la que al menos la fortuna ha minimizado al máximo los daños personales.
