Los centros de mayores de La Rioja no limitarán las visitas a los residentes ni aplicarán restricciones en las salidas a pesar de que se han detectado dos brotes por COVID: en la residencia de La Estrella de Logroño y en el centro Madre de Dios de Haro, lo que ha provocado un total de 56 contagios que han derivado en cinco ingresos hospitalarios en planta, ninguno grave.
El consejero de Servicios Sociales y Gobernanza Pública del Gobierno de La Rioja, Pablo Rubio, y la directora general de Dependencia, Discapacidad y Mayores, María Somalo, han detallado en una rueda informativa que recoge EFE la situación de los 33 centros de mayores de la comunidad, donde viven unos 3.000 residentes. Ambos han indicado que en la residencia de Logroño hubo 37 positivos detectados por test de antígenos -de los que finalmente se han confirmado solo 25 en prueba PCR- y en la de Haro se han identificado hasta la fecha otros 19.
Somalo ha destacado que el brote de Logroño se originó tras el contacto estrecho de un residente con un familiar contagiado, mientras que en el de Haro fue un trabajador del centro el que portaba coronavirus. Todos los residentes contagiados tienen síntomas leves, como pequeños picos de fiebre o dolor de cabeza, y en el caso de los cinco hospitalizados, su ingreso se ha debido a otras enfermedades y este lunes podrían obtener el alta.
Rubio ha matizado que, si la incidencia aumentara en los próximos días o semanas, “se podrían adoptar medidas restrictivas para las residencias, pero siempre que también se apliquen para el resto de la comunidad autónoma”.
Entre estas medidas, se exigiría que los visitantes hayan completado la pauta de vacunación o que acrediten un test de antígenos negativos para acceder al centro de mayores.
Pero de momento, el consejero ha recalcado que “no está previsto restringir los derechos de las personas mayores que viven los centros residenciales”.
Sin embargo, ha considerado que es “normal” que se hayan producido contagios en la última semana, dada la situación de transmisión comunitaria que existe en La Rioja, el resto de España y a nivel internacional. “La previsión es que en las próximas semanas haya más brotes en otras residencias por esta situación de transmisión comunitaria”, ha reconocido Rubio.
Por otra parte, la directora general ha indicado que los trabajadores que sustituyen a los que se van de vacaciones están vacunados y se realizan un test de antígenos semanal.
Además, ha recordado que, desde el pasado 9 de mayo, familiares y amigos de los residentes tienen libre acceso, sin límite de tiempo ni número de visitantes, y también hay libertad para salir de los centros.
La directora general de Dependencia, Discapacidad y Mayores ha insistido en que se debe “normalizar” esta situación de contagios entre residentes, que es completamente diferente a la de olas anteriores al haberse completado la vacunación por lo que los síntomas son “leves” en la mayoría de los casos positivos.
