Un Consejo de Gobierno extraordinario en La Rioja aprobaba el uso obligatorio de mascarillas para prevenir los contagios de COVID-19 en la comunidad a partir del 14 de julio de 2020. Apenas un año después, el Consejo de Ministros ha ratificado la “flexibilización” de esta medida: la mascarilla dejará de ser obligatoria en la calle.
Después de convertirlas en un nuevo accesorio de moda, de todos los colores y estilos, con cadenas para llevarlas colgadas, con cajitas para guardarlas en el bolso… este sábado ya nos podremos “despedir” de las mascarillas, pero con condiciones. Ya lo advirtió la ministra de Sanidad, Carolina Darias: “La mascarilla la tenemos que llevar siempre con nosotros aunque no siempre la llevemos puesta”.
No será obligatorio utilizarla al aire libre o en espacios abiertos, siempre y cuando se mantenga la distancia interpersonal de 1,5 metros. Tampoco será necesaria en residencias, centros sociosanitarios o instituciones si más del ochenta por ciento de los que allí viven ha recibido la pauta completa de la vacuna.
Entonces, ¿cuándo debemos ponérnosla? Seguirá siendo imprescindible en espacios cerrados como bares, comercios… y en el transporte público. Además, en los eventos multitudinarios, aglomeraciones y si te cruzas con algún conocido y “os ponéis al día” sin mantener la distancia.
Podría decirse que este sábado es un día clave en cuanto a la deseada vuelta a la normalidad se refiere, pero la responsabilidad individual sigue siendo imprescindible, no solo por posibles multas o sanciones, sino, sobre todo, por una cuestión meramente sanitaria.
