Los máximos responsables de la gestión de la pandemia del coronavirus en La Rioja, Sara Alba y Pello Latasa, han hecho este lunes un llamamiento a la “calma” tras decidir suspender durante quince días la vacunación con AstraZeneca, en comunión con el resto de comunidades y el Ministerio de Sanidad.
La consejera de Salud ha destacado que “El sistema de control y vigilancia farmacológica han funcionado bien” y ha apelado a “aquellas personas que tengan dudas respecto a los efectos que puedan sentir en relación a la vacunación, tienen información puntual en la web del Gobierno de La Rioja o en el teléfono COVID Responde” (el 941 298 333).
Alba ha insistido en que “la campaña de vacunación sigue en la comunidad, con la administración de las dosis de Pfizer y Moderna”.
Por su parte, el director general de Salud Pública ha insistido en que “lo primero que hay que transmitir es calma”. “Este es un evento poco frecuente”, ha subrayado, detallando que “en España se ha notificado un caso de aproximadamente 800.000 personas vacunadas con este fármaco”.
Latasa ha ahondado en la importancia de “diferenciar entre los efectos adversos esperados y los poco frecuentes”. Al respecto de los primeros, ha indicado que las personas que se han vacunado con AstraZeneca es probable que sufran cefalea, mientras que la preocupación debe aparecer si “14 días después una persona sufre dolores cabeza intensos y persistentes, que cambian significativamente al tumbarse o se asocian a síntomas neurológicos como alteraciones visuales”. En ese caso, ha especificado, “es recomendable contactar con los servicios sanitarios”.
Así las cosas, el director general de Salud Pública ha indicado que antes de adminsitrar la segunda dosis de AstraZeneca “se estudiará la situación y se dará respuesta con tiempo y forma”.
