UD Logroñés

Robarle tiempo al tiempo: el Logroñés firma un nuevo empate frente al Sabadell (0-0)

Hay una cosa que no se le puede reprochar al Logroñés: tiene las cosas claras. Mucho. Realistas hasta la extenuación. Y con sus ideas pretende llegar al fin del mundo, que no es otra cosa que la salvación en LaLiga Smartbank. “Ahora mismo somos un equipo poco apetecible”, reconocía Sergio Rodríguez hace unos días sobre su situación en el mercado invernal. El técnico es consciente de las limitaciones de su equipo y del club. Por eso fuera de casa opta por una defensa de cinco (tres centrales) después de repasar la tabla clasificatoria. Con veintiocho puntos antes de saltar al césped de la Nova Creu Alta, siete por encima del descenso, poca fantasía ante un rival directo.

El Logroñés ha llegado a Sabadell plagado de bajas por COVID-19 (Ander Vitoria, Siddiki, Álex Pérez y Zelu), Iñaki (lesión desde tiempos inmemoriales) y Leo Ruiz (acumulación de tarjetas) para enfrentarse a otro recién ascendido lleno de necesidades. A la espera de acoplar a los recién llegados Pacheco y Nano Mesa en la maquinaria blanquirroja, Sergio Rodríguez repite con tres centrales (Gorka, Bobadilla y Clemente) para guardar la ropa a la espera de tiempos mejores. Partido largo y desgaste del rival. Cuanto más tiempo pase, mejor para los riojanos y sus esperanzas. El reloj es su mejor amigo con el 0-0 en el marcador.

Pese a las imprecisiones en defensa y el dominio del Sabadell, el Logroñés ha logrado aguantar la primera parte sin grandes sobresaltos y sin tirar a puerta, aunque esto último ya ha dejado de ser novedad. El conjunto arlequinado ha tenido la más clara en las botas de Stoickhov, quien no volverá a cometer un fallo tan clamoroso en toda su carrera deportiva. Es imposible repetirlo. Contra local que llega hasta Álvaro Vázquez, pase de la muerte a Juan Diego Molina Martínez y balón a las nubes para lamento catalán. Ha tenido todo a su favor y más.

Tras la reanudación, Sergio Rodríguez ha hecho dar un pasito al frente al equipo. Bobadilla fuera (tarjeta amarilla justo antes del descanso) y Unai Medina dentro con Iago López como central. Andy ha pegado el primer aviso. Nada más comenzar la segunda parte, disparo desde treinta metros y paradón de Ian Mackay en la escuadra para despejar a córner. El guardameta con más paradas de la categoría ha dado al traste con la mejor ocasión hasta el momento de los blanquirrojos, pero el pasito hacia delante ya estaba dado. Más jugadores en campo rival. Más presión.

El arreón visitante no ha sido suficiente para doblegar al Sabadell. El Logroñés ha dominado durante casi veinte minutos, pero no ha conseguido perforar la portería de Mackay y ha vuelto a mirar el reloj con su plan habitual. Y a cantar como Café Quijano: “Despierto y no sé cómo robarle tiempo al tiempo. Cada día, cada noche es un momento. Se escapa y no le robo tiempo al tiempo. Sólo sé que es infinito lo que siento y doy gracias por tenerte y sólo pienso a ver cómo le robo tiempo al tiempo”. Un punto es más que cero puntos. Menos que tres, pero más que cero. La supervivencia como máxima.

Y en ese sobrevivir, Nano Mesa como revolución. Con el seis a la espalda, que hasta hace unas horas pertenecía a Álvaro Arnedo, ha saltado el futbolista tinerfeño al césped de la Nova Creu Alta como nuevo jugador del Logroñés. Sin Leo ni Ander Vitoria, Roni como titular y Nano Mesa como sustituto. Esa es la actual pólvora riojana para salvar la categoría, junto a los destellos de Paulino, la eterna espera por saber si Bogusz es tan bueno como dicen en Leeds y la incorporación al once de Pacheco.

Dos seguidas para Nano Mesa. La primera ha ido como un cohete al palo (minuto 85) y la segunda ha ido a escasos centímetros de la portería con la cabeza (minuto 86). Rica salsa canaria de Primera División para dar mordiente al ataque logroñés. Dos destellos para ilusionar a toda una afición en su debut, aunque no ha logrado el estreno soñado. La banda de la navaja todavía sigue afilando sus armas y sólo ha marcado en uno de los últimos ocho partidos (contra el Mirandés en el estreno de 2021). Sin embargo, suma un punto contra un rival directo y ya tiene el golaverage a su favor. 0-0 que no pasará a la historia del fútbol, pero que sirve para borrar otra jornada del calendario. Robarle tiempo al tiempo.

Subir