La Liga SmartBank no da descanso. Da igual que ganes o pierdas. Aún sin reponerte de la última victoria o el último triunfo, la Segunda División tiene otro partido para ti sin apenas recuperación. Tras las dos últimas derrotas (4-0 ante el Mallorca el domingo y 1-2 ante la Ponferradina el miércoles), el Logroñés visita Vallecas este sábado (14 horas) para enfrentarse a uno de los gallitos de la categoría. Por el momento, reina la tranquilidad en el seno del club y así lo ha señalado el técnico Sergio Rodríguez.
Con tanta acumulación de partidos también se le acumulan las ruedas de prensa al entrenador riojano (desde el sábado sólo ha ‘descansado’ el lunes y el jueves), aunque mantiene que es más “complicado” hacer la alineación que atender a los medios. “Sobre todo cuando ves que la gente entrena bien y quieren minutos. Es el momento más difícil y lo tengo que asumir por mi puesto”.
– ¿Cómo está el equipo?
– Anímicamente estamos bien. Sabemos de la dificultad de la competición. Venimos de seis victorias consecutivas y eso es algo anormal en la categoría y algo anormal para un recién ascendido. Cosechar derrotas no nos hunde porque nos hemos enfrentado a equipos con potencial. Ahora vamos a un campo complicado contra un rival difícil y no vamos a hundirnos cada vez que perdamos. Hay que afrontar con positividad el año.
– ¿Y físicamente?
– Hay de todo. Los partidos pasan factura cuando se acumulan las semanas. No tienen grandes molestias salvo las lesiones de Mallorca (Santamaría y Roni), así que los demás esperemos que estén todos. Tienen el cansancio normal de jugar cada tres días. No recuperan al cien por cien, pero sí están en condiciones.
– ¿Está en condiciones de jugar Rubén Miño?
– Esperemos que sí. Si no jugó no fue porque no estuviese en condiciones sino porque el riesgo no compensaba para las alturas de temporada en las que estamos, sobre todo teniendo a Roberto de baja durante un tiempo. Entendemos que el riesgo disminuye este sábado.
– ¿Qué exigirá el Rayo?
– Exige estar a un nivel muy alto para poder competir con ellos y sacar puntos. Es un equipo con grandes individualidades, especialmente en la gente de arriba. Mucho desborde y mucho nivel. Son capaces de rotar el equipo sin que se resienta porque tiene fondo de armario. Exigirá mucho en todos los aspectos, sobre todo en lo defensivo porque son muy desequilibrantes.
– Pese a las derrotas, el equipo está en mitad de tabla y con nueve puntos por encima del descenso.
– Es algo que debemos aprovechar. Hemos conseguido algo muy importante con las seis victorias. Hemos sacado la cabeza de los puestos de descenso y eso hace que la presión “mala” no la tengas. Debemos de jugar con esa presión “buena” y ya sabemos lo que hay. Debemos aprovecharnos de la situacion que hemos conseguido sin perder la competitividad ni la agresividad. No podemos caer en la relajación. Cada resultado no es a vida o muerte, pero no podemos perder la “presión buena” por ganar cada semana.
– ¿Habéis muchas dado vueltas al partido de la Ponferradina?
– Lo hemos hablado. El cambio entre la primera y la segunda parte fue abismal. Cuando pasa algo así, hay que hablarlo porque tiene relevancia. Intentaremos que no vuelva a pasar, más allá de los errores técnicos que van con el día. Yo voy más a no perder el rigor, la concentración, la intensidad… lo que nos caracteriza. Si perdemos esa esencia, es difícil que podamos competir. Como entrenador, también le he dado vueltas sobre las soluciones que le di al equipo.
– Vallecas es un lugar complicado para encontrar una buena sensación, pero también donde al Logroñés le puede lucir.
– El Rayo es un rival muy complicado porque tiene individualidades que destacan por encima de la media de la categoría. Creemos que todos los rivales nos van bien si hacemos las cosas de forma correcta. La competición, con tanto partido seguido, te obliga no sólo a pensar en el partido inmediato sino en el que has tenido y el que viene. Es un cómputo de cosas e informaciones para tomar las mejores decisiones. Juegan los once mejores para ese partido, aunque en esa decisión también está la carga de minutos, las tarjetas, el rival… lo metes en una batidora y decides.
