El joven entrenador Diego Martínez (Logroño, 4 de febrero de 1984) afronta un partido muy especial frente al Izarra, su anterior equipo y en el que cuadró un gran final de temporada para salvar la categoría. A falta de diez jornadas para el final de la competición, cosechó cuatro victorias, cinco empates y una sola derrota. Sus recuerdos son buenos, tal y como cuenta a NueveCuatroUno: “Partido especial, fue mi debut en la categoría y bueno, conoces el vestuario y a la gente con la que te vas a enfrentar. A partir de ahí, intento dar la máxima información a mi equipo”.
Nadie mejor que Martínez para analizar al cuadro estellés: “Es un equipo que sigue siempre con la misma idea y aunque cambien algunos jugadores, siempre mantiene un bloque bastante parecido, con ocho o diez jugadores que ya estaban”. Piezas importantes como Eguaras, Hinojosa, Sola, Yoldi o Gorka Laborda continúan en un bloque reforzado. En el capítulo de refuerzos, destacan el portero Mikel Pagola o los atacantes Iván Agudo, Javi Gómez u Óscar González.
“Nosotros estamos contentos con la plantilla que tenemos, con el grupo humano que hay y con cómo están saliendo las cosas. Nos hubiera gustado sumar más puntos. Creo que el Izarra (lleva un punto) tiene jugadores con mucha experiencia y ha llamado a pelear en la zona alta de la tabla”, explica el técnico.
Pese a sus buenos mimbres, la realidad es que los de Merkatondoa llegan con urgencias. Cosecharon su primer punto frente a la SD Logroñés (1-1) y esperan inaugurar ahora su cuenta a domicilio. Los riojanos, por su parte, llegan tras ganar a la Mutilvera (0-1), son segundos de su subgrupo y podrían asaltar la cima de la clasificación.
Foto: CD Calahorra.
Efectividad máxima y control sanitario
El Calahorra solamente ha marcado dos goles, pero le suponen ya seis puntos. Abonados a resultados binarios (dos victorias por 0-1 y una derrota por ese mismo marcador), el bloque ha construido una gran muralla defensiva: “Hemos recibido muy pocas ocasiones de gol y ser sólidos te hace progresar como equipo. Acertando dos veces, hemos sumado dos victorias. Hemos tenido ocasiones en los tres partidos y estamos tranquilos, porque teniendo ocasiones, los goles van a llegar”. Por el momento, el delantero Iker Amorrortu totaliza los tantos de los riojabajeños.
En estos tiempos donde el COVID-19 amenaza con intensidad al territorio riojano, el Calahorra está sabiendo mantener a raya la pandemia: “Desde dentro, la sensación es de mucha seguridad. Nuestros jugadores se dedican a entrenar y descansar, se cuidan y tienen una vida social muy reducida. Ellos intentan estar en casa con la familia más directa, y sobre los test, es importante hacerlos para tener un control más riguroso de la situación. Nos interesa jugar y también mantener la situación con un nivel de salud buena”.
“Para muchos es su vida y su trabajo, así que es importante que la Segunda División B siga adelante. Nosotros entrenamos con el mismo grupo y somos los que hacemos convivencia en el día a día. Muchos jugadores viven juntos y son de fuera, así que eso les ayuda a no tener mucha más vida social que el fútbol. El entorno nos permite llevar las cosas de forma controlada, sabiendo que el riesgo no existe y que pueden aparecer brotes en cualquier momento”, termina.
Foto: CD Calahorra
