El Ayuntamiento de Haro ha asegurado este miércoles que la decisión de suspender el servicio de autobús urbano de la ciudad no está sujeta “únicamente” a motivos económicos, sino que se adopta “por responsabilidad pública y pensando en la salud de los ciudadanos que lo utilizaban a diario”.
El autobús fue suspendido el pasado mes de marzo, siguiendo las indicaciones del Gobierno de La Rioja por la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, y al finalizar el contrato de este servicio, con el pliego de condiciones preparado, el equipo de Gobierno tomó la decisión de paralizar ‘sine die’ su licitación “por la incertidumbre de la situación sanitaria”.
“Si se licitara y se pusiera el servicio en marcha y por motivos del coronavirus tuviéramos que volver a suspenderlo, cosa que ya ha sucedido y puede volver a ocurrir, el Ayuntamiento tendría que indemnizar a la empresa adjudicataria por este parón con el consiguiente perjuicio económico para las arcas municipales”, señala Arantxa Carrero.
La concejala insiste en que la motivación que ha llevado al Consistorio a tomar esta decisión “ha sido salvaguardar la salud del principal colectivo que hacía uso del autobús urbano, en la mayoría de los casos ciudadanos dentro de la franja de edad considerada de alto riesgo por las autoridades sanitarias”.
Arantxa Carrero.
Carrero asegura que “es muy complicado garantizar una limpieza continuada del autocar en todo momento y este riesgo no está dispuesto a asumirlo este equipo de Gobierno, por prudencia y por responsabilidad hacía la salud de nuestros mayores”. Tras suspender el servicio en primavera, la edil se pregunta “cómo vamos a caer en ese error en estos momentos, cuando la pandemia está inmersa en una segunda ola”.
El Ayuntamiento de Haro ve “inconcebible” que “no se cuestione el acceso de visitas en las residencias de personas mayores o los centros de salud y se ponga en tela de juicio la utilización de un habitáculo cerrado, estrecho y con dificultad para mantener la distancia de seguridad y en el que existe un alto riesgo de contagio al que se sometería a un colectivo tan vulnerable”.
En vías de solución
El Ayuntamiento de Haro está “en proceso de dar solución” a los usuarios del urbano “para que puedan tener un servicio seguro y sin riesgo de contagio a la hora de acudir, por ejemplo, al centro de salud”. Esta gestión “se está intentando ejecutar con los mismos plazos administrativos que supondría sacar a licitación y la posterior adjudicación del mismo servicio”.
