La Rioja

El personal del Servicio de Rehabilitación exige permanecer en el Hospital San Pedro

El personal del Servicio de Rehabilitación exige a Riojasalud permanecer como unidad de trabajo en el Hospital San Pedro. “Lamentamos que el Gobierno de La Rioja haya decidido romper la Unidad sin planificación ni información, lo que perjudicará al trabajo multidisciplinar con otras áreas como Neurología, Traumatología, etc, reduciendo la calidad de atención al paciente”.

La reforma estructural y de ubicación que Riojasalud ha propuesto en los últimos días supone desplazar el Servicio de Rehabilitación de Adultos al Hospital de La Rioja. “Estamos muy preocupados. Estos cambios van en detrimento del buen hacer de un servicio ya de por sí muy precario y extremadamente necesario para la calidad de vida de la ciudadanía”.

“Entendemos que el Servicio de Rehabilitación debe quedarse dentro del Hospital San Pedro como centro de referencia de la salud en La Rioja. Por ello, exigimos a Salud que habilite áreas, que las hay, para este servicio en el San Pedro”, han indicado los trabajadores en un comunicado.

Esta medida, han argumentado, va a tener consecuencias directas en la calidad de la atención a los riojanos. “Tememos que el tratamiento de los pacientes, tanto ingresados como ambulatorios, se vea afectado por el cambio. Entre otras cosas, porque no se ha definido si estarán en el Hospital de forma continuada el médico (rehabilitador de referencia de la unidad de rehabilitación del daño cerebral-ictus), la logopeda y la terapeuta ocupacional”.

Con este desplazamiento, el resto del equipo de Rehabilitación del San Pedro, Atención temprana y Rehabilitación infantil y adultos se quedarían “cojos”. Faltaría la colaboración y el trabajo multidisciplinar dentro del equipo y el transdisciplinar con otras especialidades medicas del hospital, como Neurología, Traumatología, Pediatría, Oncología, Neumología, UCI, etc.

“Como su nombre indica, una unidad no puede estar dispersa. En diciembre del 2018, el Gobierno de La Rioja presentaba a bombo y platillo una unidad de rehabilitación que ahora divide. Si la unidad se dispersa, disminuye la calidad del trabajo compartido porque no estamos juntos para solucionar los problemas a afrontar. Del mismo modo, aumentará la lista de espera. Y si dividen los recursos materiales en dos, sin aumentarlos, rebajará proporcionalmente la calidad de la atención”, han añadido.

Por el momento, el personal de este servicio desconoce si mantendrán salas de rehabilitación para los pacientes ingresados, adecuadas y dotadas con los materiales necesarios para ello. “A día de hoy, aún seguimos sin conocer los tiempos ni formas de este traslado. De hecho, nos enteramos de este cambio cuando iniciaron los trabajos de reforma para adecuar las salas para Urgencias”.

Por otra parte, como parte del Hospital y trabajadores que han lidiado directamente con pacientes COVID-19, han expresado su “más absoluto” apoyo a los compañeros de la Urgencia. “Entendemos que nuestra ubicación es idónea para esta remodelación del Hospital San Pedro. Eso sí, estamos completamente en desacuerdo con la ubicación que nos han encontrado, por todos los puntos anteriormente expuestos”.

Por último, han manifestado su preocupación sobre el tema con una comunicación dirigida a dirección médica, aunque todavía no han recibido respuesta al respecto.

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