Hace ya varias décadas que la magia de la radio, la amistad sincera y la gastronomía inocularon un sueño que ahora, al fin, podrá cumplir el periodista que -a buen seguro- mejor conoce la Segunda División del fútbol español. No en vano, Sergio Sánchez Tendero lleva 16 años asomándose a las bandas de los estadios de la categoría para narrar a los espectadores de Movistar+ (antes, Canal +) todo cuanto se cuece en el terreno de juego.
El anhelo que saciará en pocas semanas Sergio Sánchez no es otro que pisar uno de los pocos estadios “con sabor” (los otros son El Plantío de Burgos y el Francisco de la Hera de Almendralejo) que todavía no ha podido visitar para trabajar: Las Gaunas. “Mi ilusión es máxima”, confiesa a NueveCuatroUno. Y se sustenta en tres pilares: “El mítico ‘gol en Las Gaunas’ que escuchaba cuando era niño en la radio junto a mi padre, todo lo que me ha hablado de su tierra Raúl Ruiz (compañero en la cadena y natural de Yagüe) y la posibilidad de visitar la calle Laurel”.
El periodista no olvida los ecos imborrables del Club Deportivo en la categoría: “El Logroñés era uno de esos equipos a los que se les coge cariño por su modestia, su capacidad de lucha, su bravura… Resumía la esencia de muchos valores con los que yo me identifico”. Y ahora, aun siendo consciente de que Las Gaunas no es exactamente aquel estadio que aupó entre paraguas y barro a su equipo a la gloria de Primera, cuenta las horas para pisar sus instalaciones: “Sin ser el mismo estadio, tiene ese sabor añejo; a clásico, a histórico”.
De hecho, si el pasado año bautizó la Segunda División como la ‘más competitiva de la historia’ por el nivel de los equipos que componían el calendario, este año tiene otra impresión. “Puede ser la Segunda de los históricos, porque hay equipos con mucho sabor. Es verdad que hemos perdido a un campeón de Liga como el Deportivo de la Coruña, pero han llegado clubes como el Espanyol, que tiene una masa social enorme, o el Castellón, que en Segunda B tenía un número de abonados desproporcionado. El Cartagena es un equipo que estuvo a punto de alcanzar la Primera División con Juan Ignacio Martínez y el Sabadell es otro histórico”, explica.
Lo que nos hemos perdido y lo que viene
La Rioja se asomará desde este sábado a un fútbol profesional que Sergio Sánchez define como “el cielo”. El pasado verano dejó atrás el dudoso honor de ser la comunidad que más tiempo ha estado -20 años, ahí es nada- sin viajar por Primera y Segunda División. ¿Qué nos hemos perdido en esa travesía por los páramos del infrafútbol? El periodista que mejor conoce la Liga SmartBank lo tiene claro: “La evolución de un fútbol que, pese a todo, era en muchos aspectos amateur a un fútbol tremendamente profesionalizado en el mejor de los aspectos. Es verdad que los equipos antes eran de los socios y ahora son empresas; tampoco es habitual que los gestores sean de la tierra, como en el caso del Logroñés. Ahora los jugadores saben que van a cobrar seguro, está todo híper controlado y el nivel ha ido subiendo gracias a esa seriedad en los pagos”.
Y aunque la pandemia alejará por el momento a los aficionados de ese “cielo”, trae consigo un ‘daño colateral’ que puede beneficiar al Logroñés, a juicio de Sergio Sánchez: “Quizás todo está ahora más equilibrado en lo deportivo, porque la inversión que pueden hacer los clubes con las lamentables circunstancias del COVID-19 es menor y eso le va a dar a la categoría un carácter más competitivo y bonito para el aficionado”.
Cuestionado sobre si aquellas declaraciones en las que Félix Revuelta fijó el objetivo del Logroñés para el curso en ciernes, Sánchez no considera ninguna locura que el equipo logre acabar entre las diez primeras posiciones de la tabla: “Partamos de que es difícil, pero imposible no hay nada”. Además, desde su experiencia en la categoría desgrana qué debe hacer el club blanquirrojo para lograrlo.
FOTO: Eduardo del Campo.
“Para alcanzar ese objetivo el primer paso es estar pronto por encima de los últimos clasificados, poner distancia con la zona de descenso para pensar en otras cosas. Es fundamental que el equipo sea rocoso, que sea muy difícil ganarle. Si lo consigue, a partir de ahí, a pensar a lo grande”, explica. De partida, el rostro de la Segunda División en Movistar+ cree que el presidente del Logroñés hace bien siendo optimista: “Hemos visto precedentes como los del Mallorca, que pasó de Segunda B a Primera en dos años. O el Granada, que también subió directamente y llevaba 35 años sin jugar en la élite”. ¿La explicación a estas hazañas? La continuidad de las plantillas y el ojo para firmar incorporaciones: “El Mallorca mantuvo un muy buen bloque y supo apuntalarlo con los jugadores necesarios en ese momento. Creo que en Segunda los directores deportivos de los clubes influyen mucho más que en ninguna otra categoría”.
Y aunque la prudencia y el raciocinio han acompañado siempre a un periodista ajeno al ruido y la bravuconada, Sergio Sánchez no oculta que la Liga SmartBank arranca con un club destacado entre los favoritos al ascenso. “Por potencial económico señalaría al Espanyol, que además ha apostado por un entrenador que conoce perfectamente la categoría; Vicente Moreno subió a Primera con el Mallorca y se quedó con la miel en los labios en el Nàstic”. Eso sí, advierte de que en el fútbol profesional “el dinero ayuda, pero no lo es todo”. Porque hay cosas, como cumplir el sueño de pisar Las Gaunas, que no se pagan dinero.
