“Queridos clientes y amigos, nuestro cierre es momentáneo al haber detectado en uno de nuestros trabajadores positivo por COVID-19”. Es el mensaje que esta semana ha puesto en alerta a todo Navarrete, ante la posibilidad de que la localidad acogiese un nuevo rebrote de la epidemia.
El emisor del mismo es un pub del municipio, que a través de las redes sociales daba cuenta de la situación a sus clientes, en aras de la transparencia. No obstante, cinco horas después el mismo establecimiento ha detallado que se trataba de una falsa alarma, ante el revuelo generalizado entre la población: “Debemos acalarar que se ha tratado de un malentendido; se nos ha confirmado que no se trata de un caso positivo de COVID-19”.
Este jueves, el pub ha ahondado en las explicaciones, detallando que una de sus camareras se sintió indispuesta y “una serie de malentendidos que entonces creíamos ciertos” les llevaron a pensar que el motivo de su malestar no era otro que el coronavirus. A partir de ese momento, sus responsables optaron por cerrar el bar, a fin de no convertirlo en un posible foco de contagio: “Sabíamos que esto supondría para nosotros una pérdida tanto económica como de confianza, pero preferimos perder a que, por ganar un euro más, exponer a alguno de nuestros clientes a la enfermedad”.
“Creednos que volveríamos a hacerlo si así os ponemos a salvo”, concluye el comunicado del establecimiento.
