El decreto de estado de alarma suspendió la mayor parte de actividades de nuestra rutina. Poco a poco la situación mejora y la desescalada comienza a dar sus frutos con el paso de las diferentes fases. Durante este últimos mes, cada quince días las dudas y la incertidumbre sobre lo que se podía y lo que no se podía hacer se apoderaban de nosotros.
Levantadas muchas de las restricciones, una de las preguntas más repetidas ha sido: “¿Se puede ir al monte?” y si está permitido, “¿con qué condiciones?”. La respuesta por parte del Gobierno no se ha hecho esperar. “Se puede, sí, sin salir de la provincia, en grupos máximos de 15 personas y manteniendo las medidas de distanciamiento e higiene”.
Así que, una vez aclarada la duda, los amantes de la naturaleza y la recolección se setas están de enhorabuena. Aunque la temporada de primavera está en su punto final “y no sabemos cómo está la situación porque llevamos dos meses sin ir al campo, es de suponer que, a estas alturas del año, sean pocas las que queden”, asegura Carlos Manuel Pérez del Amo, presidente del Grupo Micológico Verpa.
Pinícola
Pero como todo a lo relativo a la naturaleza no es para nada concreto, la temporada que empezó en marzo “hace indicar que ha sido bastante fructífera. No ha habido casi heladas, ha habido humedad y suficiente calor pero no excesivo. Además, si aun lloviera estos días un poco, alguna especie más se podría localizar”.
Quien vaya estos días al monte en busca de setas de seguro encontrará algún perrochico y boletus, es más, “tal y como apunta la situación climatológica, podrían enlazarse con alguna especie de verano”, afirma Pérez del Amo. Aunque, “entre las pocas lluvias de estos días y los fuertes vientos poco se podrá recolectar”. Asimismo, el presidente del Grupo Micológico Verpa, ha confirmado que, tanto el confinamiento como el tiempo, “han venido muy bien para la recuperación de los micelios”.
Marzuelo
Han sido dos meses sin salidas al campo, por lo tanto, las reproducciones de hongos en algunas zonas “habrán aumentado, algo que viene muy bien ya que llevamos unos dos años de exceso de recolección y este será un pequeño descanso”.
Son muchos los aficionados al monte y a las setas que volverán a respirar estos días aire puro y llevar a cabo su afición. “Somos muy urbanitas y tenemos añoranza de la naturaleza. Ella es el mejor refugio para nuestro ir y venir de la vida diaria. Por ello, un paseo por el monte se ha hecho tan necesario”.
Seta fina
