Crisis del Coronavirus

Gonzalo de Berceo y su nueva movilidad: “Como todo en la vida, tiene ventajas y desventajas”

Las vallas comenzaron a sitiar las zonas de aparcamiento de las calles Gonzalo de Berceo y República Argentina a principios de mayo. Este era el principio del cambio de movilidad que el Ayuntamiento de Logroño ya está llevando a cabo en varias vías. El objetivo principal, según ha explicado el alcalde, Pablo Hermoso de Mendoza, es que la ciudad sea vista como espacio público.

La pandemia del COVID-19 ha traído consigo la necesidad imperiosa de la denominada distancia social. Y con ella, la reorganización del espacio urbano con el fin de favorecer al peatón sobre el coche. La mayoría de los comerciantes de estas zonas reniegan de las nuevas obras y denuncian lo perjudicial que esta medida está siendo y va a ser para sus negocios.

Uno de los que sí está a favor de esta nueva reurbanizacion en Gonzalo de Berceo es Álvaro, de Álvaro The Barber. Para él, esta apuesta por el peatón, la bici y el transporte público beneficia a todo el conjunto de la ciudad. Este proyecto, según el dueño de la barbería, permite aparcar más fácilmente que antes.

“Un treinta por ciento de mi clientela vive cerca del local, por lo que no tiene que coger coche. El setenta por ciento restante llega desde zonas más lejanas de la ciudad incluso de pueblos. Ahora vienen y aparcan enseguida. Otra cosa es que queramos hacerlo gratis. En mi opinión, lo que la gente que viene aquí busca es la rapidez, y prefieren pagar cincuenta céntimos y no dar mil vueltas”.

“De nada me sirve tener una zona blanca y no poder aparcar como sucedía antes”, incide Álvaro ‘The Barber’, indicando que “la rotación de zona azul que hay ahora es imprescindible para que el comercio de ciudad pueda competir con las grandes superficies de la periferia”.

Otro punto de vista. Marta (Espacio Óptico) reconoce que la iniciativa está bien para guardar la distancia de seguridad y protegerse, pero apunta que ahora es imposible aparcar en esta calle: “Si ya de por sí era difícil encontrar aparcamiento en Gonzalo de Berceo, ahora es inviable. Y eso los clientes lo están notando mucho. Desde que hemos vuelto a abrir ha habido muchas quejas de usuarios que han venido a la óptica”.

En la misma línea se mantiene Miguel, propietario de Horotel, el negocio de suministros para la hostelería que se encuentra en esta misma calle. “Como todo en la vida, tiene ventajas y desventajas. Estas obras resultan beneficiosas para que las personas puedan pasear sin tener que acercarse unos a otros. Pero, ¿y los negocios?”.

Miguel recuerda que siempre ha sido una vía muy ancha, por lo que los coches en doble fila no impedían del todo el tráfico. “Ahora, para contrarrestar, han puesto zona azul. Aun con todo, sigue siendo muy difícil encontrar un sitio libre para dejar el coche y eso los clientes lo notan mucho”.

Desde Periódicos y Revistas Carmen han visto como todo este nuevo proyecto llegaba por sorpresa. “A nosotros nadie nos avisó y de un día para otro nos encontramos con este escenario”. El dueño sabe que su negocio es de compra rápida, y tal y como se ha reordenado ahora la calle, eso va a ser imposible. “Antes dejabas el coche en doble fila y en un minuto ya habías comprado el pan o el periódico y estabas de vuelta. Ahora si quieres comprar en esta zona tienes que ir a aparcar bastante lejos”.

Otra de las cosas que han observado desde este establecimiento es que la gente es reacia a transitar por las zonas ampliadas. “Siguen yendo por la acera y estas obras están suponiendo problemas para las personas mayores o con movilidad reducida a la hora de montarse en el autobús. Normalmente paraba cerca de la acera, se bajaba un poquito y la gente se subía sin problema. Esto ha cambiado y cuesta más, aunque recientemente han colocado una pequeña rampa para suavizar la situación”.

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