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“A lo clásico le damos un toque moderno sin renunciar a su esencia”

Adrián y Marina apuestan en el centro de Logroño por el diseño, la reutilización y el interiorismo

Los inicios siempre son difíciles, pero la ilusión, las ganas y, en este caso, la imaginación y el trabajo hacen que un sueño se convierta en realidad. Y eso es precisamente lo que Adrián Barquín y Marina Vega han llevado a cabo abriendo su propio negocio: MAAD, un estudio de diseño, reutilización e interiorismo.

Ambos son diseñadores de interiores que estudiaron en la ESDIR (Escuela Superior de Diseño de La Rioja) y que, “cuando estábamos viviendo y trabajando en Madrid y visitábamos El Rastro, nos dimos cuenta de que la reutilización era el futuro”. Estos dos jóvenes riojanos observaron que “había muchas piezas desaprovechadas que tenían un potencial tremendo”.

Con esa idea en la cabeza y con un proyecto de diseño personalizado también de telas, Adrián y Marina comenzaron su andadura hace menos de un mes en el centro de Logroño, concretamente en la calle García Morato, 20. Un local que demuestra a la perfección su idea de proyecto: “A lo tradicional se le puede dar un toque moderno sin renunciar a la esencia de la pieza”.

“En un mundo tan globalizado y demasiado práctico a veces, nos olvidamos que lo esencial ya lo tenemos en casa en muchas ocasiones. No hace falta comprar muebles nuevos, solo es necesario darles una vuelta a los que ya tenemos proporcionándoles una segunda vida”.

La reutilización, el diseño del presente y del futuro

La restauración artesanal ALIUM, creada por Adrián Barquín, surge para satisfacer la necesidad de dar una segunda oportunidad a piezas que sin duda lo merecen, y dotarlas de una personalidad y exclusividad que nunca han tenido.

“En nuestro entorno tenemos todo tipo de muebles que tienen un gran valor sentimental para nosotros, pero ya tienen muchos años y los vemos antiguos. Con las sillas, por ejemplo, además de restaurarlas, creamos unos diseños de telas por ordenador que luego imprimimos para tapizarlas. Las temáticas, al gusto del consumidor, desde motivos para niños, hasta imágenes de Logroño pasando por fotos personalizadas”.

Son infinitas las posibilidades que estos diseñadores ven cuando observan cualquier tipo de espacio u objeto. “Yo no pongo límites, digo a todo que sí, no tengo miedo”, confiesa Adrián. Y a estas ideas, a veces “desorbitadas”, les pone la cordura Marina. “Cuando suelta sus ideas más lanzadas le digo que podemos ir enfocándolo de una manera u otra, lo vamos encauzando y entre los dos surge la creación”.

Y como todo en esta vida, todo depende del presupuesto: “El dinero puede limitar la imaginación, así que queremos hacer ver que el diseño no es elitista. Con menos dinero también se pueden hacer proyectos frescos y modernos. Que la gente no piense que la rehabilitación o decoración pasa por un dineral. Nosotros adaptamos cualquier cosa tirando de imaginación y reutilización”.

Futuros proyectos

Hasta el momento, el trabajo de estos dos artistas ha ido de menos a más, y entre los proyectos más diferentes y creativos que han llevado a cabo, encontramos una silla fotoluminiscente que brilla en la oscuridad y tiene un tapizado en 3D.

Pero sus ganas y aspiraciones van más allá. Tanto Adrián como Marina saben que para que la reutilización se haga fuerte y mantenga su posición, los niños deben ser partícipes de esta manera de trabajar. Por ello, van a llevar a cabo varios talleres donde los pequeños y jóvenes van a ser los protagonistas. “Queremos que, de una manera didáctica y divertida, los niños pongan a volar su imaginación y diseñen sus propias creaciones a partir de varios elementos que nosotros les daremos”.

Barquín también es un amante de las letras, por lo que han decidido poner en práctica una idea en la que, a través de una máquina de escribir, el propio Adrián va a crear y editar micro relatos a medida. “Vamos a dar la posibilidad de que alguien nos dé una idea y, a partir de ahí, crearé una historia. Después, la editaré en un papel especial para que tenga un encanto único”.

En definitiva, un nuevo negocio en el centro de Logroño donde lo tradicional se reinventa gracias a los toques modernos que estos dos artistas le otorgan sin renunciar a la esencia.

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