CARTA AL DIRECTOR

“¿Dónde está el límite?”

Me gustaría contarles lo que nos pasó a una amiga y a mí la noche de Nochevieja. Salimos de bares las dos solas. Al llegar al primero, nos colocamos al fondo del bar y un chico que estaba cerca nos empezó a hablar de manera aleatoria, como respondiendo a nuestra conversación, y le ignoramos, ya que no nos interesaba hablar con él.

Agarró a mi amiga en un par de ocasiones y le dijimos que nos dejara en paz. Nos pidió disculpas y minutos después volvió a la carga. Intentó agarrarla para hacerse un selfie. A mí me agarró de las manos en un par de ocasiones y alguna cosa más.
Se volvió a disculpar de nuevo. Decidimos entonces irnos a otro bar.

En el nuevo establecimiento, otro chico se quedó parado a nuestro lado, mirándonos fijamente y de vez en cuando haciendo ademán de tocarnos. Le increpamos un par de veces hasta que la última, mientras mi amiga y yo hablábamos, intentó besarla en la boca (el beso quedó en la mejilla). Ahí ya le amenazamos con dale un bofetón si volvía a acercarse. Lo hizo y tuvimos que irnos de bar para evitar problemas mayores, ya que se le veía bastante ‘pasado’.

Esto no es la primera vez que nos pasa a nosotras ni a conocidas nuestras. Incluso hemos pasado por situaciones peores. Yo he decidido salir sin beber para poder estar más alerta. No pasa todos los días, pero sí que pasa y a veces es hasta violento cuando rechazas su compañía o su conversación. Te insultan, incluso han intentado agredirnos.

Me niego a salir con miedo pero… ¿qué opciones tienes? ¿Irte de un bar que te gusta por culpa de personas que no saben lo que es un NO o enfrentarte y arriesgarte a acabar peor? ¿Llamas a la policía porque un chico ha intentado abrazarte? ¿Dónde está el límite?

*Puedes enviar tu ‘Carta al director’ a través del correo electrónico o al WhatsApp 602262881.

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