El tiempo es relativo. Pero no solo en lo que se refiere a los relojes, sino también en lo meteorológico. Así, los vecinos del valle se han despertado esta Nochevieja bajo un cielo plomizo, pero los más aventureros y quienes residen en las cotas más altas de La Rioja han tenido que tirar de gafas de sol.
Porque las nubes se han vuelto caprichosas en este cierre de año y han mostrado su versión más ‘marinera’ en la sierra riojana. De esa vista privilegiada han disfrutado los montañeros que han despedido 2019 practicando una de sus actividades favoritas y varios de ellos nos han hecho llegar fotos que, si bien no hacen justicia al espectáculo que solo se aprecia en su plenitud ‘in situ’, dan buena muestra de la belleza de la estampa.
Y si en estático la postal es para enmarcar, en movimiento el mar de nubes adquiere propiedades del todo hipnóticas:
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