Después de 28 años poniendo sobre la mesa una gran variedad de setas recogidas en el entorno del valle del Cidacos, unas comestibles y otras no, Arnedillo acoge este fin de semana la vigesimonovena edición de las Jornadas Micológicas. El objetivo, acercar a la población una formación necesaria sobre lo que se puede llevar a casa y lo que no en una época del año en la que los montes riojanos se colman de transeúntes, y no solo para disfrutar de los colores otoñales.
Cada año se exponen en torno a 350 variedades de setas, aunque este año se espera llegar a las 400. Estos ejemplares se recogerán durante la mañana del sábado, a partir de las 8,30 horas, en la salida organizada al hayedo de Santiago. Los asistentes estarán acompañados de expertos que les enseñarán a buscar, recoger e identificar adecuadamente distintas variedades de setas.
Aunque la participación es gratuita, se requiere de inscripción previa en la Oficina de Turismo de Arnedillo o en el Ayuntamiento de la localidad hasta este viernes 15 de noviembre a las 14 horas. Ese mismo día, a partir de las 17 horas, se procederá a la clasificación de las especies recogidas en el pabellón junto al polideportivo municipal.
Josué Rodríguez con unos ejemplares de níscalos.
El protagonismo se lo lleva de nuevo el biólogo y experto micológico Josué Rodríguez, quien desde los 13 años lleva participando en estas jornadas, aunque su pasión por las setas viene de antes. Este sábado, a las 20 horas en el Centro Cultural San José, Rodríguez expone su conferencia ‘Setas tóxicas: cómo identificarlas’, donde se centrará en aquellas especies que más confunden a la población, como la amanita phalloides, también conocida como el hongo de la muerte, y el champiñón falso o agaricus xanthodermus.
“No hay un criterio común para identificarlas, por eso hay que conocerlas bien, porque son muy frecuentes en zonas de encinos, hayedos, robledales,…”, incide Rodríguez, animando a todos los interesados a asistir a su charla. Así, apunta que la amanita phalloides, reconocida por su anillo y sombrero en forma de campana, deja cada año entre diez y doce muertes, siendo 2014 un año fatídico con cerca de una treintena de fallecimientos por intoxicación.
El experto recalca la importancia de una concienciación social, “porque con la actual normativa de recogida de setas, los guardas se preocupan más de revisar los permisos y ver los kilos que llevas que de controlar el tipo de setas que has recogido”. En este sentido, Rodríguez defiende una “reinversión del dinero recaudado para destinarlo a la formación de los guardas para que informen a la gente que recolecta sobre las especies tóxicas, así como a la limpieza de los montes y el cuidado del medio ambiente, porque pagamos pero luego encuentras suciedad”.
Una de las novedades que caracterizan a esta edición es que los propios bares y restaurantes ubicados en Arnedillo colaborarán con el evento elaborando cada uno dos pinchos micológicos para degustación de los turistas que este fin de semana se acerquen al valle del Cidacos. Además, la abundancia de lluvias durante este otoño ha brindado a los montes un mayor atractivo que el anterior, donde la sequía fue más pronunciada.
En la última jornada, el domingo, los asistentes tendrán la posibilidad de degustar por tres euros raciones de revuelto de setas y migas con setas en el frontón cubierto junto a las piscinas municipales. El precio incluye la cazuela de barro con la ración, pan y un vaso de vino tinto, siendo la cantidad recaudada destinada a fines sociales. Además, la jornada incluirá un mercado de artesanía, un taller infantil de manualidades y la actuación de los Gaiteros de Arnedo y Cervera.
El éxito de esta actividad, explica el alcalde de la localidad, Pedro Montalvo, reside en que “Arnedillo fue una de las pioneras en visibilizar la micología, además de presumir de un enclave y recursos turísticos muy buenos”. Así, un pueblo con cerca de 500 habitantes tiene en torno a 600 plazas hoteleras ofertadas gracias al balneario y los alojamientos turísticos como casas rurales.
