Vivimos en un momento en el que es fácil confundir las estaciones meteorológicas por los cambios constantes del tiempo. Y en esa coyuntura, aunque el inicio del invierno no está previsto hasta el 22 de diciembre, los próximos días en La Rioja van a recordar mucho a su panorama.
Porque si eres de esas personas que lloran por no ver el sol ya puedes ir comprando ‘kleenex’ porque los lagrimones te van a durar una buena temporadita. Si las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología están en lo cierto, el panorama se va a ir enfriando más que las posibilidades de que el Eibar acabe ganando la Liga.
Según la Aemet, las temperaturas mínimas no superarán los 6 grados hasta próximo aviso y la amplitud térmica será más que reducida, al rondar las máximas los 11 y 12 grados. Pero es que, a todo eso, además hay que añadir que los paraguas van a ser los reyes de la fiesta a partir de la tarde de este miércoles y no volverán a cerrarse hasta bien entrada la semana que viene.
Si eres amante del ‘deporte blanco’ (hablamos siempre de prácticas legales), sabemos lo que estás preguntando: “¿Frío y+ lluvia = nieve?”. Pues es probable, porque la cota va a ir descendiendo paulatinamente desde los 1.900 metros de este inicio de semana hasta los 800 en la jornada del viernes, si bien a partir de ese momento remontará hasta los 1.200. Añádele, eso sí, que el viernes La Rioja entra en el nivel amarillo de alerta por fuertes vientos que soplarán entre 70 y 80 kilómetros por hora, haciendo que la sensación térmica baje hasta los 3 grados centígrados.
Así que no queda otra que irse habituando a los primeros coletazos de tiempo desapacible y preparar la ropa de abrigo porque, a menos que te apoltrones en el sofá con las primeras películas navideñas (están al caer), la vas a necesitar.
