Sergio Rodríguez ha expresado sus impresiones tras conseguir el récord de victorias de la UD Logroñés (siete), logrado ante el Real Unión: “El partido ha sido un poco loco y el resultado, evidentemente positivo, pese a que estado ajustado y ellos también han tenido sus opciones”. También ha valorado el récord: “No era lo más motivante, pero ganar siete partidos seguidos en estas categorías es muy complicado. Se lo decía a los jugadores, yo he jugado muchos años y nunca he logrado hacerlo. Yo no hago historia, el mérito es de ellos”.
El técnico ha valorado la dificultad de la categoría, donde para él no es normal vencer todos los partidos 3-0 o 4-0, sino sufrir. En ese sentido, ha querido realizar algo de autocrítica, con respecto al partido de esta jornada: “Podríamos haber evitado el sufrimiento, porque creo que hemos gestionado más el partido por momentos, pero a veces el rival y la situación de partido te lleva a jugar de esa manera, con menos equilibrio y más verticalidad, cuando igual a veces no la necesitábamos tanto”
Un descontrol quizá influido por la lesión de Errasti en el calentamiento, sustituido por Rayco: “Cambias un jugador, pivote defensivo, que nos está dando equilibrio por un media punta. Es evidente que el equipo tiene que tener transformaciones. No quiere decir que sea mejor de una manera o de otra, pero te cambia”. Sergio ha analizado más al detalle: “Nos ha faltado estar más en lo defensivo en vez de atacar”. Y en ese sentido, ha reincidido en la idea del equilibrio, aportando un matiz más: la debilidad en centros laterales.
Aprendizaje y a por el próximo partido
También ha apreciado el mérito del oponente: “Por momentos lo hemos hecho bien, cada vez que hemos tenido ese punto de pausa y hemos llevado de lado a lado, aparecían más espacios. Hay veces que el partido te lleva a una situaciones diferentes a las adecuadas”. Y en ese sentido, ve margen de mejora en la comunicación lateral-extremo y ha afirmado tener más claro como enfrentarse a un planteamiento como el del Real Unión, con cinco centrales: “El 80 por ciento de equipos te juegan con cuatro, pero estos dos últimos partidos nos sirven para aprender”.
El técnico ha dedicado elogios a la afición: “En los últimos minutos nos han echado una mano increíble.Se han dado cuenta de que el partido estaba muy difícil y podía pasar cualquier cosa. Han visto que estábamos cansados, pero que el equipo da todo hasta el último momento. No sé si se dan cuenta pero ayudan mucho, ver a tu gente que está respaldándote en momentos díficiles, es mucho más satisfactorio que que te aplaudan en momentos fáciles”.
Por último, ha valorado a su próximo rival, el Bilbao Athletic (Lezama, domingo 11:00 horas): “Está sacando unos resultados extraordinarios con mucho jugador novel, a diferencia del año pasado, cuando tenía una plantilla más experimentada”. En el mismo contexto, ha afirmado que el ritmo de los equipos de cabeza del Grupo II está siendo muy alto y que ellos no quieren ponerse objetivos todavía, sino seguir sumando puntos.
