El árbitro Mimoun Larhlid ya ha enviado el acta del Berceo – Arnedo a la Federación Riojana de Fútbol (FRF), dos días después del encuentro que se vio obligado a parar por un incidente ocurrido en la banda. La noticia sobre el césped no fue el fútbol sino los insultos dirigidos hacia la asistente Laura Bezares.
El acta firmada por el colegiado, a la que ha tenido acceso NueveCuatroUno, afirma que varios aficionados del Arnedo comenzaron a insultar a la colegiada con insultos tales como “p…, hija de p…”, “te vamos a matar, sabemos donde vives”, “todos los findes igual”, “eres malísima, esto no es lo tuyo” y “las mujeres no servís para nada”.
Inmediatamente después, el árbitro decidió suspender el partido temporalmente: “Ante estos hechos, impido la reanudación del juego y me dirijo hacia mi árbitra asistente y le pregunto que si se encuentra bien y si se han producido más incidentes aparte de los que yo he sido testigo, contestándome que no”.
Seguidamente, el colegiado pudo identificar a los autores: “Al llegar a la altura de los aficionados les señalo a los tres individuos que había identificado como autores de los insultos, mostrando éstos en ese momento una actitud agresiva hacia mi persona y mi árbitra asistente”. Tras ello, trató de conseguir sus datos, pero ningún aficionado quiso facilitarlos.
El colegiado solicitó la presencia policial para evitar incidentes posteriores y continuó el partido: “Tras cuatro minutos con el juego detenido, decido reanudar el mismo al entender que era mejor proseguir el encuentro a sabiendas de que había llamado a la policía y que restaban pocos minutos para la finalización del mismo, que no reanudarlo y generar más crispación entre los aficionados, tanto locales como visitantes, y con el riesgo de enfriamiento que pudiesen padecer los propios jugadores”.
Una vez acabó el encuentro, Bezares se dirigió hacia los vestuarios, visiblemente afectada. “En ése lapsus de tiempo, y antes de nuestra llegada al vestuario, según me comunica mi árbitra asistente, han accedido al mismo tres jugadores del equipo local, con la única finalidad de darme ánimos. Unos cinco minutos después de nuestra entrada en vestuarios, acceden al mismo cuatro miembros de la Policía Nacional, a los cuales relato los incidentes producidos en el encuentro”, explica el colegiado.
Los culpables, identificados a la salida
Los agentes acompañaron a Larhlid hacia el aparcamiento del estadio, con el fin de hacer un filtro entre los vehículos situados en el aparcamiento y tratar de detectar a los culpables. Todos ellos debían salir por un camino: “En uno de esos coches identifico a una de las tres personas que habían proferido los insultos sobre mi árbitra asistente, quedándose en ese lugar dos agentes de policía junto al aficionado identificado, mientras yo inicio mi camino de regreso al vestuario acompañado con dos agentes de la policía”.
La colegiada entró acompañada por el asistente a los vestuarios: “Ella me comunica que han accedido al vestuario varios directivos (no sabe exactamente el cargo de dichas personas), al objeto de interesarse por mi estado emocional, proporcionándole ánimos y palabras de aliento. Posteriormente lo ha hecho el presidente del CD Arnedo (Ildefonso Ruiz), pidiéndome disculpas y arrepentido de lo ocurrido en el encuentro”.
“Instantes después acceden al vestuario dos miembros de la Policía, y uno de ellos se dirige a mi árbitra asistente, nos solicita el DNI, a ella y a mí, le recomienda hablar con un miembro femenino de la Policía, la cual charla unos minutos con mi árbitra asistente, calmándole y dándole indicaciones de cómo puede obrar en casos de ésta índole”, continúa relatando.
“Realizamos las tareas administrativas, entregamos las licencias a ambos delegados, haciéndoles saber que el acta del partido no la voy a realizar en el campo, sino que prefiero hacerla con tranquilidad en mi domicilio. Abandonamos las instalaciones hasta nuestro vehículo particular sin ningún contratiempo”, termina.
La condena
El presidente del Arnedo, Ildefonso Ruiz, ha mostrado tolerancia cero tras conocer el contenido del acta: “Los que se identifiquen y se comprueben como culpables, no van a volver al campo. Está clarísimo. Tendremos que ver si son socios o no del club, si son socios les echaríamos. Si no son socios, no sé cómo actuarán otros organismos; pero a la gente por otras cosas les prohíben la entrada a los recintos deportivos, eso ya no depende tanto de mí”.
La información remitida a la Federación por el colegiado confirma lo adelantado por NueveCuatroUno el pasado sábado: una cadena imparable de insultos y amenazas graves por parte de, al menos, tres aficionados del club arnedano, que fueron identificados por la Policía Nacional el día del encuentro. Según ha explicado el dirigente del club arnedano, todavía no disponen de esta información y siguen trabajando en ello para depurar todas las responsabilidades.
