Carlos Coloma afronta uno de los momentos más duros de su vida, pues ha fallecido Doroteo, su abuelo y gran inspiración. Tenía 86 años y se trata de una figura capital en la vida del ciclista riojano, presente siempre tanto en los buenos como en los malos momentos. El funeral será este lunes en la iglesia de San Martín en Albelda de Iregua.
Antes de dejar este mundo, su nieto le hizo cumplir sus sueño: ver juntos al FC Barcelona en el palco del Camp Nou. Fue una noche inolvidable para dos barcelonistas de corazón, la de la tremenda remontada ante el PSG (6-1). Ambos gozaron de lo lindo en el coliseo blaugrana, todavía más con el definitivo tanto de Sergi Roberto. “Dios, Dios, Dios. ¡Qué pasada! ¡Mi abuelo lloraba de verdad!”, confesaba el deportista tras vivir uno de los encuentros más increíbles de la historia del deporte rey.
Doroteo vivió también con intensidad el día en que Carlos ganó la medalla de bronce en Río 2016. No pudo bajar a ver la final de los Juegos Olímpicos en directo al frontón y se quedó tumbado en el salón hecho un manojo de nervios. En el programa ‘Informe Robinson’, explica que salió al balcón cuando calculó que había finalizado la carrera y escuchó tirar tres cohetes seguidos: “Algo bueno ha tenido que pasar porque si no la gente no tira cohetes”.
Panadero de profesión durante toda su vida (llegó a trabajar hasta dieciocho horas seguidas) ha sido siempre un fiel apoyo para Carlos Coloma, que se ha despedido de él en Facebook con unas preciosas palabras: “Gracias por todo lo que nos has enseñado y sobre por enseñarnos a vivir hasta el final con la ilusión y la energía de un niño, disfrutando y valorando cada momento. Siempre estarás con nosotros Dorito. Te quiero como tú ya sabes”.
