La UD Logroñés ha vuelto a brillar en Las Gaunas, superando a la Cultural Leonesa por 3-2 y recuperando un ramillete de sensaciones perdidas. Tras tres días de ‘garrafón’, por fin ha tocado un Gran Reserva. Ya era hora de que todos salieran con una sonrisa tras ver a su equipo favorito. Ya era hora de marcar los primeros goles en casa y de quitarse las dudas. Un triunfo que puede ser también punto de inflexión.
Era una tarde de urgencias. Nervios e incertidumbre en la parroquia local latentes desde el inicio: “Equipo, echale huevos”. Lo ha escuchado Ander Vitoria, respondiendo de la mejor manera posible. Golazo de cabeza para curar la herida. La primera ocasión clara, a la cazuela, como en La Planilla. Allí, aquel tanto provocó relajación. En esta ocasión no podía ocurrir lo mismo. La victoria debía quedarse en Logroño o la tormenta acabaría por descargar y dejar consecuencias.
Con viento a favor, a los riojanos no les ha importado buscar el contragolpe. Iñaki y Ander Vitoria se han entendido muy bien al espacio, aprovechando los riesgos que corría la Cultural. A punto ha estado el punta vasco de abrir brecha en el electrónico. Fuera, pegado a la cepa del poste. Y han venido los visitantes con las rebajas. Disparo de Dani Pichín a bocajarro, detiene Miño pero la deja muerta y Gudiño no ha perdonado. Gol encajado, sí, pero las sensaciones no estaban siendo nada malas.
La grada ya estaba contenta y se ha ido con una sonrisa a tomar el bocadillo cuando Lander Olaetxea ha puesto el 2-1 con un golazo. Respuesta vital al empate culturalista. El equipo ha cambiado la imagen plana, apagada y sin ideas de las primeras jornadas. Los de Sergio han apostado por un juego vertical e incluso brillante por momentos, superando al ‘gallo con más cresta’ de este grupo. Un conjunto para el que el ascenso no es un sueño, sino una obligación.
Otra diferencia clave: la presión en el centro del campo. Andy y Errasti han completado un sensacional encuentro en la recuperación y Olaetxea ha sido un buen timonel en tres cuartos. Sobriedad también atrás, con un sobrado Caneda y un Gorka que no se ha complicado. Y Leandro, el arquero visitante, ha tenido trabajo de todos los colores. Mientras tanto, Ñoño ha saltado a calentar. Ovación general para el de ‘La Bahía’, que no pasa por su mejor relación con Sergio Rodríguez.
Continuaba el festival de ocasiones blanquirrojas, con un Iñaki omnipresente por la zurda. No llegaba la guinda y eso implicaba seguir remando porque la Cultural también ha demostrado sensación de peligro. Cinco minutos para el final, penalti para la UD Logroñés. Gol de Andy y se acabó el sufrimiento. Fiesta por todo lo alto en el campo y un equipo que despierta y se quita sus dudas por la puerta grande. Dio igual el 3-2 en el minuto 93, pese al error de Miño, porque todo estaba hecho. Próxima cita: visita al Salamanca en El Helmántico, a buen seguro una batalla apasionante.
