Las fiestas de San Bernabé son sinónimo de algarabía en la calle, alguna que otra batalla a las puertas del Revellín, productos de todo tipo en los mercadillos renacentistas y mil y una actividades más. Pero de las seis jornadas en que se desarrollan, sin duda la más señalada es la de este martes.
Y este año, como tantos otros, San Bernabé corre el riesgo de ser ‘meón’, porque las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología no son nada halagüeñas. La Aemet ‘asegura’ agua hasta las doce del mediodía en Logroño y reduce el porcentaje de precipitación a ‘solo’ el 55 % en las horas centrales del día, si bien el sol relucirá por la tarde.
Mal asunto, teniendo en cuenta que los actos centrales se desarrollan durante la mañana: el reparto del pez, el pan y el vino (a partir de las diez) y la procesión del patrón (a partir de las doce), en la que veremos si la alcaldesa no da sus últimos banderazos a remojo.
En cuanto a las temperaturas, pues más bien fresquitas. Los más madrugadores deberían llevar una chaquetita a las largas colas para cumplir el voto del pez (se esperan 11 grados de temperatura) y la rebeca tampoco sobrará en la procesión de San Bernabé (entre 14 y 17 grados a esa hora en la capital riojana).
