En los últimos años se ha convertido en el mayor quebradero de cabeza de esos creativos publicitarios que creen haber encontrado la fórmula mágica para colocar un producto correcto, sin más, como la quintaesencia de la alimentación. José Manuel López Nicolás ha convertido en arte eso de tumbar falsos mitos sobre ‘superalimentos’ y empieza a haber codazos para asistir a alguna de sus charlas.
No es un farol. En la última que ofreció en La Rioja medio centenar de personas se quedó sin sitio. Pero la vida siempre ofrece una reválida y este martes (19.30 horas) el profesor de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Murcia regresa al Aula Magna del Edificio Quintiliano para analizar las ‘Verdades y mentiras de la alimentación del siglo XXI’. Y con entrada libre. Date prisa.
– ¿Cuáles son los planteamientos que quiere abordar en su conferencia?
– Me gustaría incidir en la responsabilidad social que tenemos todos los miembros de la sociedad para llevar una alimentación saludable. Hoy en día existen muchos agentes implicados que nos desvían de las pautas adecuadas de alimentación y también hay otros muchos agentes que podrían hacer por remediarlo. En España somos líderes en muchas facetas, pero también sobre malos hábitos a la hora de comer y sobre eso deben tomar medidas los legisladores, las empresas, los científicos y los medios de comunicación, pero también los ciudadanos debemos tomar medidas.
– ¿Cuál es la mayor mentira en el momento actual de la publicidad sobre alimentos?
– No me gusta demasiado la palabra engaño, porque implicaría en cierto modo un fraude, una estafa. Yo prefiero decir que la industria nos intenta confundir a través del miedo. A menudo digo que vivimos en un ‘Mundo sin’: sin lactosa, sin aditivos, sin conservantes, sin gluten… Y los consumidores, ante ese miedo, compramos ‘por si acaso’. La estrategia de la marca es meter miedo sobre un determinado ingrediente y luego vender como bondad que su producto no lo tenga. Vivimos en una época con los alimentos más seguros de la historia, pero también en el momento en el que peor se come.
– Y de esas confusiones, ¿cuáles son las más palpables?
– Hay muchas. La taurina está demostrado que no nos aporta nada, como el L-Casei, el criptofano, el colágeno oral -que está muy de moda ahora- o el hialurónico. Y no lo digo yo, lo dice la Agencia Europea de Seguridad Alimentacia. Es un organismo oficial que no vela por que esos productos sean perjudiciales, sino que aporten a la salud los beneficios que dicen que aportan. El problema es que los dictámenes de la Agencia no siempre llegan al conocimiento de la gente y la industria utiliza trucos para esquivarlos y seguir induciendo al consumidor a creer que su producto es beneficioso.
– También sucede que hay algo de ‘posverdad’ en las creencias. Nos posicionamos y, si nos demuestran lo contrario aludimos a las conspiraciones.
– Es que tomar esos alimentos de los que he hablado es muy cómodo. Es mas cómodo decir que me voy a tomar un botecito de este lácteo para aumentar mis defensas que llegar a casa y ponerme a preparar pescado o legumbres… Y hay gente a la que le da igual lo que diga la Agencia Europea de Seguridad Alimenticia; estamos acostumbrados a culpar a otros, pero tenemos que estar alerta.
– Hay otro fenómeno curioso en la actualidad, las ‘tribus alimentarias’: vegetarianos, veganos, los afines a la paleo dieta…
– Es cierto. La realidad es que ya no comemos para nutrirnos, sino buscando otras cosas imposibles de obtener. De hecho, no es tan difícil llevar una buena alimentación: todos sabemos cuándo comemos bien y cuándo lo hacemos mal, solo hay que aplicar un poquito de sentido común.
– Cuenta por llenazos sus conferencias. Es casi una ‘rockstar’ de la alimentación saludable.
– Creo que se explica porque, tengas la formación que tengas, al final todos tenemos una despensa y todos comemos cada día. Si hablara de física cuántica sería otra cosa, pero esto moviliza a la gente, sobre todo cuando pones los puntos sobre las íes. No es fácil dar conferencias cuando das nombres y marcas, aunque yo nunca he recibido ninguna presión por parte de ninguna empresa. Lo que digo es que hay informes que dicen que este producto no ayuda en esto tan concreto que está vendiendo; solo hago de transmisor de este tipo de información, que no siempre está al alcance de todo el mundo.
