El joven entrenador riojano Diego Martínez ‘Bolly’ tiene un nuevo reto por delante. Sus servicios han sido reclamados por el Izarra y debutará en Segunda División B. El club estellés pasa por un momento muy complicado y ha tenido que destituir a Rodrigo Hernando por los malos resultados. 2 victorias en los últimos 23 partidos tienen la culpa de su cese. Los navarros han dejado escapar demasiados partidos en Merkatondoa y ahora se ven en posiciones de descenso, decimooctavos con 28 puntos.
El logroñés no cuenta con experiencia en la categoría de bronce, pero sí en Tercera Riojana, donde explotó a las mil maravillas todas las virtudes que le pudo ofrecer el Náxara. Convirtió al equipo de La Salera en una máquina ofensiva, que llegó a alcanzar los 117 goles en temporada regular en la 16/17. En aquel año, los blanquiazules rozaron la gesta. Tras eliminar al Mar Menor y al Villarrobredo (en la tanda de penaltis), llegó la final contra la Peña Sport.
Los najerinos nunca olvidarán aquella eliminatoria. Tras el empate a 1 de la ida, que pudo ser diferente si los locales hubieran tenido suerte con la madera, tocó la vuelta en San Francisco. Más de 1.200 riojanos acudieron hacia Tafalla para vivir un día histórico. No pudo ser, pero aun con la decepción, hubo fiesta sobre el terreno de juego y en la capital del Najerilla. No es para menos, miles de personas no podrán olvidar nunca lo que este técnico y sus jugadores hicieron: rozar el ascenso a Segunda División B.
Se trata de una persona muy querida en el fútbol riojano. “Llegué a sentir que toda La Rioja era un poquito del Náxara”, afirmó en su despedida. Desde que dejara a los blanquiazules en junio de 2018, ha tenido varias ‘novias’ y equipos como la SD Logroñés y el Arnedo se interesaron por sus servicios. Pese a ello, ha decidido esperar la oportunidad para subir una categoría. Su pasión por el fútbol es inmensa y lo ha demostrado. En este impás, ha sido comentarista de los partidos de la UD Logroñés en Radio Rioja (Cadena SER) y también ha participado en la tertulia televisiva ‘Minuto 90’.
Un reto diferente
En esta nueva etapa, ‘Bolly’ podría tener que afrontar un cambio de estilo de juego. Merkatondoa no es La Salera. Su moqueta no permite un juego estético ni demasiado combinativo. Allí hay que jugar directo, aprovechar la estrategia y ser rocoso atrás. Esa fórmula le ha valido al Izarra para mantenerse en estas pasadas temporadas. Estella no es lugar para florituras y la permanencia vale oro. Restan diez partidos y el riojano espera revertir la situación y lograr la salvación.
