Las intensas precipitaciones caídas estos días empiezan a dejar su huella en los principales cauces de La Rioja. El Ebro, sin ir más lejos, ya ha causado problemas en la zona más occidental de la región.
En Haro, el incremento del caudal ha provocado las primeras inundaciones en la desembocadura del Oja-Tirón y los servicios de emergencias se mantienen alerta por cómo pueda evolucionar el aumento del volumen de agua transportada. La Policía Local ha pedido a las personas que tengan animales en las fincas aledañas a los cauces que los saquen para evitar problemas.
Desde la Jefatura de la Policía Local se mantienen vigilantes por si hubiera algún aviso de “pico de crecida” y han advertido a los agricultores de la zona para que se mantengan alerta, principalmente con los que tienen terrenos junto a los cauces. En este punto se indica que en otras ocasiones, y en circunstancias similares, las crecidas han afectado a los terrenos agrícolas, con edificaciones, que se encuentran próximos a los cauces.
Por todo ello, los agentes recuerdan a los propietarios de las fincas que pudieran verse afectadas y en las que guardan animales como perros, caballos o de otro tipo, que se mantengan vigilantes, ante los avisos que se puedan producir. El objetivo es que los retiren a tiempo, para no lamentar la muerte de ninguno de ellos, así como salvaguardar las propiedades que se puedan ver dañadas.
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Situación similar a 2015
La información que maneja SOS Rioja evoca a la crecida registrada en el año 2015, con un pico de en torno a 1.300 metros cúbicos de agua previsto para la próxima medianoche.
Este servicio de emergencias detalla, además, que la aportación de los ríos riojanos es de momento escasa. A partir de Logroño los caudales serán mayores en la zona de Alfaro, por la aportación de los ríos Ega y Aragón.
Muy pendiente del nivel del río Ebro a su paso por Logroño. @AytoLogrono pic.twitter.com/iiw2orzwxC
— Cuca Gamarra (@cucagamarra) 24 de enero de 2019
