Este miércoles Wine Fandango nos abrió sus puertas para iniciar una serie de mesas de debate que, bajo el nombre de ‘Encuentros Clandestinos’, pretendemos realizar con continuidad para abordar asuntos de interés social y de la actualidad riojana. El formato solo tiene una premisa: los y las participantes en las mesas no sabrán quiénes les acompañarán en la charla hasta que lleguen a la cita; y un límite: 60 minutos.
Elegimos hablar de la igualdad entre mujeres y hombres (tras escuchar a las cinco contertulias soy capaz de explicarlo con mucha más propiedad) en esta primera cita porque queríamos darle al tema esa importancia. El encuentro nos sirvió para descubrir algunas cosas.
Por ejemplo, que la violencia de género no está entre las mayores preocupaciones de los españoles, según el barómetro del CIS publicado 24 horas antes. En 2017, en España 49 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o ex-parejas. En lo que llevamos de 2018, 11, según los datos oficiales. Desde 2003, cuando se empezaron a contabilizar, son más de 900. Novecientas. Pero no nos preocupa.
También nos sirvió para ponerle cifra al drama en La Rioja. La Oficina de Atención a la Víctima del Delito atiende, cada año, entre 400 y 500 casos de violencia de género. Más de uno cada día. Todos los días. Una barbaridad. Una locura de la que la mayoría no somos realmente conscientes. Tanto como para no preocuparnos.
Y para utilizar, a modo de conclusión, algunos titulares que escuchamos en la mesa: “El feminismo es igualdad”; “La educación genera transformación”; “El mensaje más importante a las víctimas de la violencia de género es: ‘te vamos a ayudar'” o “La conciliación y la corresponsabilidad son esenciales para conseguir la igualdad”.
¿Qué tal si nos preocupamos?
