El turismo en La Rioja está cada vez más desestacionalizado, pero el verano, sin duda, es el momento en el que más turistas llegan a la región. En los meses de julio y agosto de 2023 llegaron un total de 206.000 veraneantes de los 809.000 que pisaron la comunidad a lo largo de todo el año. En dos meses se acercaron una cuarta parte de los turistas anuales.
«El resto del año tiramos mucho de fin de semana y puente y ahora en julio y agosto funciona algo mejor los días entre semana», cuenta Daniel Muela, de la Asociación de Hoteles de La Rioja.
El verano puede ser la clave para que los datos turísticos en La Rioja sean de récord. De momento, mes a mes, se va confirmando un aumento de llegada de turistas a la región. Sólo abril obtuvo menos visitas que el año anterior. La clave reside en que este año la Semana Santa se celebró en marzo.
En los seis primeros meses del año han llegado a la región un total de 271.905 turistas que suponen 21.769 más que el año pasado y 43.830 más que en 2022. Es decir, casi un 20 por ciento más en estos dos últimos años.
A pesar de ello, el verano parece estar más parado de lo esperado. Al menos parece ir a dos velocidades: la de julio y la de agosto. «Ha comenzado de forma similar al del año pasado, quizás con un poco de ralentización». Lo que se nota es que «si el sábado es la ‘noche estrella’ a lo largo del año, en verano la cosa cambia» y por eso muchos de los hoteles riojanos proponen paquetes y ofertas para esos días.
En verano lo que muestra es un cambio de tipo de público. «Entre semana empiezan a verse familias con hijos que en otros meses del año es casi impensable» ya que son las empresas las que llenan los hoteles de lunes a jueves.
Lo que no cambia es que las reservas sean a última hora y eso está suponiendo que la gente se lo piense. «Como la gente espera a última hora para reservar, notamos mucho las olas de calor, esos días se nota menos afluencia, es algo que pasa en cualquier destino urbano».
Peores sensaciones veraniegas tiene Joaquín Sanz, presidente de Ascarioja. «El mes de julio está siendo un poco decepcionante en cuanto a la llegada de turistas. Tenemos clientes asiduos que repiten año a año, nos conocen y son fieles, pero estamos esperando a ver cómo va agosto para ver si salvamos el verano».
«Estamos rodeados de grandes potencias de turismo de interior como Navarra. O nos hacemos ver o es más difícil que la gente llegue hasta aquí». Reconoce que este año las reservas están siendo «de último momento» y que «muchas de ellas son de paso al destino final que está en otras comunidades, lo que reduce las pernoctaciones».
Las previsiones apuntan a que agosto será bueno. «Pero es que si agosto ya no es bueno, apaga y vámonos». Lo tiene claro: «O empezamos a movernos o se nos llevan por delante».
Los pisos turísticos son un lugar también perfecto para pasar parte del verano. El turismo también llega a través de ellos a La Rioja. «En julio hemos estado más o menos al 70 por ciento, algo menos que el año pasado», comenta Iñigo Seigido, de Arvutur.
Sin embargo, la esperanza está puesta en agosto. Sin empezar el mes las reservas de los apartamentos turísticos ya llegan al 80 por ciento. «Calculamos que el 25 por ciento de nuestros turistas están siendo extranjeros». Una buena noticia para La Rioja, que espera seguir sumando turistas para seguir con los estupendos números que se han ido registrando hasta el mes de junio».
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