Comprar aceite de oliva virgen extra saldrá a partir de este lunes un poco más barato que los precios que se han pagado hasta el momento. El Ministerio de Hacienda ha anunciado que este producto va a quedar incluido en el grupo de bienes de primera necesidad que aplican el tipo superreducido de manera permanente (del 4 por ciento en condiciones normales), tales como el pan, los huevos, las verduras o las frutas.
Ya durante el año pasado el Gobierno central rebajó el IVA de este producto del 10 (tipo reducido) al 5 por ciento ante la escalada de precios, pero la medida ha ido más allá y ahora se suprime el IVA del aceite de oliva tal como exigió Junts como condición para apoyar la investidura de Pedro Sánchez.
Y es que este manjar al que muchos hogares han tenido que dar la espalda en el último año por su encarecimiento es el que más ‘engorda’ la lista de la compra: en mayo estaba un 62,8 por ciento más caro que hace un año y desde enero de 2021 se ha encarecido un 198,5 por ciento, multiplicando así su precio casi por tres.
La aplicación del IVA del 4 por ciento al aove es una decisión que desde la DOP Aceite de La Rioja reciben de manera “positiva, especialmente para el consumidor”. Aunque la rebaja no vaya a ser muy notoria, “sí que puede repercutir en ese consumo y que esa parte que se ha perdido pueda ir recuperándose”, apunta su portavoz, Elvira Cantabrana. Por otro lado, desde el punto de vista de su efecto para las almazaras, apunta que “no va a ser un beneficio inmediato porque ellas siguen pagando lo mismo”. Además, “al tener menos cosecha, para librar costes se ven obligadas a subir precios y eso repercute en la pérdida de consumo, que es lo único que no quieren que ocurra”.
El precio, aún así, sigue ocupando niveles elevados con una media de entre 10 y 12 euros el litro en origen. Una situación que, al menos hasta que no comience la próxima campaña de recogida de la oliva no va a cambiar. “La realidad es que no hay stock de aceite, así que hasta octubre o noviembre que se vuelva a disponer de producto no se va a poder reducir el precio. Además para que el precio baje notablemente se tiene que dar cosechas muy abundantes y, atendiendo al cambio climático, esas cosechas ya no son tan grandes”, valora. Reconoce, y confía, que “el precio va a bajar”, pero asegura que “el aceite de oliva virgen extra a 3 euros el litro a lo mejor no lo volvemos a ver más”. Cantabrana incide en que esos precios de hace unos años “tampoco eran justos y no creo que volvamos a verlos”.
A pie de campo, la estampa del olivar en la Rioja marcha en buenas condiciones. “El año climático para el olivo está siendo bueno y no solo en La Rioja, también en Andalucía. Las lluvias de marzo y abril sí que ayudaron al árbol a recuperarse un poco del déficit hídrico de los años anteriores, además de unas temperaturas que han sido más suaves que el año anterior y ahora en plena época del cuajado las condiciones también están siendo favorables. Ya comienza a aparecer muestra de aceituna en los árboles y, aunque no vaya a haber un cosechón, las sensaciones son buenas en cuanto al desarrollo, o al menos mejor que las del año pasado”.
