El hambre de Primera Federación de los aficionados blanquirrojos tenía que ser saciada y qué mejor lugar para hacerlo que las calles San Juan y Laurel. A pocas horas de un partido trascendental para la UD Logroñés, lo que un día se llamó la ‘senda de los elefantes’ se ha convertido a lo largo de la hora del vermú en la senda de las bufandas, las camisetas y la ilusión por estrenar la próxima temporada una nueva categoría.
Ambiente de los buenos. Entre cánticos de ánimos, conversaciones de amigos, una de matrimonios, dos de champiñones y unos cuantos Riojas, en el templo ‘callejero’ de la gastronomía riojana cantidad de cuadrillas han aplacado los nervios de un partido que se prevé histórico en Las Gaunas. Alimentar la ilusión para vivir una tarde que quedará en el recuerdo de todos y que ya se ha empezado a vivir horas antes de que los jugadores salten al campo.
