El Trujal de Galilea repite con el premio a Mejor Aceite de La Rioja en la categoría de Cooperativas. Ha sido su gerente Helena Soto quien ha recogido el trofeo este viernes durante la celebración de los VIII Premios a la calidad organizados por la Denominación de Origen Protegida Aceite de La Rioja.
– ¿Qué valores trasmite el trujal ?
– Siempre tenemos a nuestros socios en el foco y, junto a ellos, los olivares de los que nos abastecemos con esas variedades autóctonas que tanto defendemos aquí. La clave está en preservarlas y en nuestro caso trabajamos mucho la redondilla, royuela y machona.
Mikel y Helena Soto, del Trujal de Galilea. | Foto: Leire Díez
– ¿Cómo se recibe un nuevo galardón de estas características tras 25 años de trayectoria molturando olivas?
– Pues, aunque no sea la primer vez, sigue siendo un orgullo enorme. Estos supone un certificado de calidad para el aceite que elaboramos y más viniendo de la Denominación de Origen de la que mi padre fue uno de los fundadores.
– ¿Qué retos tienen actualmente los trujales cooperativos?
– Nosotros nos estamos enfocando en mantener a nuestro cliente habitual, pero tenemos ya expectativas de que para la próxima campaña la situación comenzará a mejorar.
